El portavoz del PP de Cambados, Luis Aragunde, afirma que el Ayuntamiento va camino de ahondar en su "caos" administrativo al producirse una nueva baja laboral, en esta ocasión de una trabajadora vinculada al gabinete de la alcaldesa, Fátima Abal.

Con ella, son ya siete los empleados públicos del Ayuntamiento que se encuentran de baja, un número inaudito en la historia reciente de la administración local cambadesa. Se trata, en varios casos, de funcionarios de alto rango o de significados mandos intermedios.

Luis Aragunde sostiene que "el Concello está al límite y con grandes dificultades de funcionamiento", y relaciona la situación "con el descontento que existe y el mal ambiente que sufren los trabajadores, afectándoles de tal modo que tienen que coger una baja". Para el portavoz de la oposición, esto se debe "a la falta de coordinación y comunicación en el cuatripartito, la falta de toma de decisiones y de resolver los problemas del día a día".

Para Aragunde, esta situación trasciende el ámbito meramente laboral en el seno del Concello, y afecta directamente a los vecinos. A este respecto, alude al grave atasco administrativo en el que está inmerso el Ayuntamiento desde hace meses, y que los propios miembros del gobierno municipal reconocen.

Sobre esto, Aragunde recuerda que la concesión de licencias de obras lleva un retraso considerable, y que de hecho el cuatripartito no quiere facilitarle la información que ha pedido para no quedar en evidencia. Acusa también a Xurxo Charlín de no haber llevado a cabo la prometida regularización de los puestos de la plaza de abastos, y a Víctor Caamaño le afea el tener que prorrogar los contratos de gestión de la guardería y de la escuela de música. "La alcaldesa sigue sin hacer nada, pero se le escapan todos los empleados que estuvieron con ella, excepto su amigo el exjefe de la Policía Local", remacha Aragunde.