La demanda de comedor escolar en Vilagarcía no deja de crecer. Prueba de ello es que el aumento de plazas que experimentaron algunos colegios en los últimos años (Carril 20, Rubiáns 12 y Vilaxoán 10) no ha conseguido eliminar la lista de espera, que se sitúa en 48 alumnos para el curso que está a punto de comenzar.

Los centros en los que la demanda supera a la oferta son los de A Lomba y Rubiáns. En el primer caso se presentaron 235 solicitudes, por lo que teniendo en cuenta que hay 202 plazas, se quedaron fuera 33 niños. Así lo confirman desde la dirección del CEIP A Lomba. Ya resulta habitual que el único comedor escolar público con cocina propia del municipio tenga lista de espera (el año pasado era de 49 alumnos).

En cuanto a Rubiáns, la capacidad autorizada de su comedor es de 116 plazas, insuficiente para dar cabida a todos los solicitantes. "A la hora de matricularse la mayoría de las familias nos preguntan si tenemos comedor", señala la directora de este colegio situado en el rural vilagarciano. Precisa que los 15 alumnos que se han quedado sin plaza en el comedor son de nuevo ingreso, puesto que los que repiten servicio ya consolidan la plaza.

Al igual que ha ocurrido en otros centros educativos del municipio, en Rubiáns la matrícula en cuarto curso de Infantil, es decir, en el de los niños de 3 años, ha experimentado un ligero repunte. Y es que actualmente hay anotados 24 escolares frente a los 20 del curso anterior.

A diferencia del año pasado, este septiembre funcionarán cinco comedores escolares públicos en Vilagarcía, pues el de O Piñeiriño se estrenó a mitad de curso. En aquella ocasión ya lo hizo con una elevada demanda, teniendo en cuenta que se abrió varios meses después del inicio de las clases.

El de este colegio es el único comedor del municipio gestionado por la asociación de padres de alumnos, pues los otros cuatro dependen directamente de la Consellería de Educación (tres tienen catering -el mismo- y uno cocina propia).

En el caso de O Piñeiriño, la empresa contratada por la Anpa es Arelas. Los padres deben telefonear a este servicio de catering para inscribir a sus hijos y el plazo sigue abierto toda esta semana. Desde la empresa apuntan que por el momento se han anotado 61 niños, por lo que la previsión es aproximarse o incluso cubrir las 80 plazas ofertadas. "Tenemos comedores de 110 alumnos en los que ahora hay 25 apuntados. Son muy habituales las inscripciones a última hora", comenta la portavoz de Arelas.

En lo que respecta a los otros dos comedores escolares que funcionan en Vilagarcía, han cubierto todas sus plazas sin dejar a ningún menor sin servicio. El CEIP Rosalía de Castro, en Carril es, junto al de A Lomba, el que dispone de una mayor oferta, concretamente de 202 comensales. Le sigue Vilaxoán, con 180. También en este caso la oferta se ha igualado a la demanda y no registra lista de espera. "El 90% de los alumnos comen en el colegio. Normalmente cubrimos todas las plazas", indica la directora del centro.

Por ahora hay 761 niños inscritos en los comedores escolares de Vilagarcía, una cifra que debido al plazo que todavía continúa abierto en el CEIP O Piñeiriño podría incrementar y rozar los 800.

En lo que se refiere al transporte de los comedores ubicados en la periferia del municipio, los tres (Rubiáns, Carril y Vilaxoán) disponen de transporte escolar de vuelta a casa. Sin embargo los niños que no van al comedor no disponen de autobús al terminar las clases, lo que incrementa la demanda del servicio de comidas.

Precios

En cuanto al precio, en los comedores gestionados por la Xunta varía según la renta familiar. Algunos niños no pagan nada y otros cantidades diarias que oscilan entre 1 y 4,5 euros.

En el caso de O Piñeiriño, el coste de servicio ronda los 80 euros para los alumnos que comen todos los días en el colegio. Cuantas menos jornadas, menor importe a abonar.