Manuel Tarrío Fernández es uno de los patrones mayores que más tiempo lleva en el cargo, siendo una de sus principales líneas de gestión el trabajo en consenso y la defensa de los intereses de marineros y mariscadores vilaxoaneses. Preside el pósito "Virxe do Rosario" desde hace catorce años, y ahora considera que debe dar paso a otros gestores con ánimos más renovados.
"Estoy cansado de luchar; los mayores palos los recibí de la Administración que no está en línea con las cofradías y parece que cada vez se aleja más de los intereses del sector", expuso ayer Tarrío Fernández.
"El sector está muy fastidiado, cada vez nos ponen más trabas. Las directrices vienen del exterior y no se tienen en cuenta a las cofradías pequeñas", añadió decepcionado con los últimos recortes.
El patrón vilaxoanés ya había anunciado a su equipo que no estaba dispuesto a presentarse a la reelección, con la esperanza de que alguien se animara a dar el paso y postular su candidatura. Sin embargo, ayer nadie había presentado una lista. Tarrío resta importancia a esta situación, ya que aclara que al no haber candidatura formal "las elecciones serán aún más democráticas porque se podrá votar a cualquier socio de la cofradía".
Manuel Tarrío asumió la presidencia de una gestora del pósito en el año 2004, tras la dimisión del anterior patrón. Desde entonces fue sumando varios períodos de gobierno con el apoyo unánime de los miembros de la cofradía. Ahora considera que ya son muchos años de gestión y que debe producirse un cambio.
