El Ayuntamiento de O Grove dispone de un observatorio privilegiado para disfrutar de la presencia de aves y mamíferos marinos. Se trata de Punta Cantodorxo, que además está considerado un enclave de valor cultural desde que se instaló allí un cruz de piedra para marcar el punto de partida del vía crucis de la Ruta Xacobea do Mar de Arousa e Ulla. Pero como se denunció hace semanas a través de FARO es un lugar prácticamente inaccesible, a causa del abandono del entorno y la gran cantidad de maleza existente.

A estas altura del verano vecinos, turistas y biólogos denuncian que todo sigue igual y que resulta casi imposible llegar a esta lengua de tierra que se adentra en la ría y favorece la observación de los delfines, tanto si se hace con fines científicos como con un carácter meramente lúdico o turístico.

Hay incluso quien apunta que la abundancia de mamíferos marinos en la ría y el trabajo que realiza el Instituto para el Estudio de los Delfines Mulares (BDRI), que precisamente tiene base en O Grove, contribuyen a potenciar a esta localidad como destino turístico privilegiado, "y sin embargo no se aprovecha esto favoreciendo la observación de estos animales desde lugares como Cantodorxo".

Desde el BDRI confirman que los estudiantes encargados de realizar la investigación desde tierra firme encuentran en Punta Cantodorxo "un lugar propicio para ello", pero lamentan que "estamos a mediados de agosto y no se ha hecho nada para mejorar el acceso a este lugar, lleno de maleza desde primavera, por lo que en ocasiones tenemos que usar machetes para abrirnos camino nosotros mismos y llegar hasta la punta".

Lógicamente, además de los problemas derivados del difícil acceso la abundancia de maleza también incrementa el riesgo de incendios, de ahí que algunos usuarios apunten que "ya que el Concello multa a la gente por tener sus terrenos abandonados debería dar ejemplo manteniendo limpios los suyos".

Otros usuarios señalan que en el entorno "hay restos de uralita abandonados, con amianto y todo, por lo que quizás a alguien le convenga tener la maleza para ocultar todo eso".

Las quejas, como queda dicho, no son nuevas, pero aumentaron en la última semana debido a que los delfines se dejaron ver en buen número en toda la ría y muy cerca de tierra, pero especialmente en el entorno de Cantodorxo, Con das Señoritas y A Toxa, como también en la costa de otros municipios arousanos, entre ellos A Illa.