La cofradía de pescadores San Antonio de Cambados optó por adelantar un día los actos solemnes en honor a la patrona de los marineros, la Virgen del Carmen, que se celebraron en el muelle de Tragove a última hora de la tarde de ayer. Decenas de barcos y lanchas acompañaron a la santa en la procesión marítima.
Desde la iglesia parroquial los feligreses partieron en una procesión terrestre hacia el muelle de Tragove, encabezada por el párroco José Aldao, poco después de las siete de la tarde. Un coche de la Policía Local abría paso por la calle de orillamar y detrás un grupo folclórico amenizaba el recorrido de toda la comitiva.
Tras la imagen del patrón de la cofradía, San Antonio, se divisaba otro carro engalanado sobre el que se desplazaba la Virgen del Carmen, rodeada por niños vestidos de marineros.
Detrás, la comitiva oficial encabezada por la alcaldesa, Fátima Abal, el patrón mayor de la cofradía de pescadores, Ruperto Costa, el capitán marítimo de Vilagarcía, Manuel Martínez Calvo, la presidenta de las mariscadoras de Cambados, vicepatrona del pósito y concejala del BNG María José Cacabelos representantes de la Guardia Civil y de la Policía Local, así como el concejal José Ramón Abal, entre otros invitados oficiales. La Banda de Música cerraba la procesión hasta la explanada del muelle.
La superficie abierta situada junto a la lonja estaba engalanada con alfombras de flores con la imagen de la Virgen del Carmen, así como varios motivos marineros, como barcos, anclas y peces.
La llegada al muelle fue saludada por la Banda de Música con una marcha, hasta que los feligreses se acomodaron con el fin de asistir a la misa de campaña oficiada por el párroco Aldao asistido por varios sacerdotes. Ya en el mar estaban apostadas decenas de embarcaciones con numerosos pasajeros que siguieron a bordo la misa marinera de Tragove.
La celebración religiosa finalizó al filo de las ocho de la tarde, momento en que todos los participantes procedieron a desplazarse hacia la orilla del muelle para despedir a la Virgen del Carmen.
Un barco de la cofradía esperaba junto al muelle engalanado con ramos y coronas de hortensias. En él subieron primero las autoridades invitadas y después las imágenes de San Antonio y de la patrona de los marineros, quienes fueron saludados con las sirenas de los barcos que esperaban para zarpar con el fin de componer la procesión marítima.
Embarcaciones de todos los tamaños, cargadas de pasajeros, lanchas e incluso una moto de agua, se dispusieron a seguir la comitiva. En uno de los barcos, el gerente de la Mancomunidade do Salnés, actuaba de anfitrión de una comitiva extranjera que está de visita por la comarca para conocer sus posibilidades turísticas. La procesión marítima fue uno de los encantos que pudieron comprobar de forma personal, tras asistir durante el fin de semana a los actos de las jornadas exaltación de la vieira.
