La circulación en la rotonda de San Simón se vio afectada la tarde de ayer durante varias horas a consecuencia de la pérdida de la carga de una góndola, que transportaba varios transformadores eléctricos. El vehículo pesado bajaba por la carretera Vilagarcía-Pontevedra (la PO-531), cargado con varios transformadores, y tomó la rotonda de San Simón con la intención de girar a la derecha e incorporarse a la Circunvalación Norte. Pero en la maniobra, la carga se movió y uno de los transformadores se cayó en plena rotonda.

Esto produjo un vertido de aceite de dimensiones considerables, y aunque los operarios retiraron el equipo con prontitud, fue necesario dar aviso al 112 Galicia y al equipo de conservación y mantenimiento de carreteras, pues el asfalto quedó impracticable para el paso de los vehículos.

Así, se desplazaron hasta el punto una dotación de los bomberos de O Salnés, con el camión nodriza para el transporte de agua. También acudió el equipo de carreteras de la Xunta de Galicia, que trataron el vertido con materiales desengrasantes y absorbentes. Entre tanto, se cerró a la circulación uno de los carriles de la rotonda, de modo que el tráfico se canalizaba por el otro y era necesario circular con precacuación.

El operativo se prolongó durante más de dos horas, debido a las grandes dimensiones del vertido -que afectó prácticamente a toda la rotonda-, y a que al haber tanta cantidad de aceite no se podía actuar directamente con agua, sino que era necesario trabajar previamente con el absorbente. Los trabajos seguían pasadas las 19.00 horas.

La rotonda de San Simón es un punto clave para la circulación en el entorno de Vilagarcía, pues en ella confluyen las dos circunvalaciones de la capital arousana, la carretera de Pontevedra y la nacional que va hacia Caldas.