A medida que se aproxima el día de la manifestación en Santiago en contra de la mina de Touro empiezan a surgir más fricciones. La patrona mayor de Vilanova, María José Vales, acusó ayer a Portos de Galicia de quitarles la pancarta en la que anuncian la marcha del domingo de la fachada del edificio del pósito. Una medida que, en su opinión, supone un apoyo claro a la empresa que pretende llevar a cabo la explotación minera entre las localidades coruñesas de Touro y O Pino.

En efecto, a media mañana la pancarta fue retirada, pero lo que hicieron en la cofradía fue volver a colocarla, solo que en vez de hacerlo en el exterior del edificio, la colocaron por dentro.

Denuncia de la empresa

Por otra parte, la empresa Cobre San Rafael, explicó ayer a través de un comunicado que ha sufrido sabotajes en la maquinaria que tienen para la realización de sondeos en la zona. Declaran que hubo tres episodios de ataques a la maquinaria de perforación y a un grupo electrógeno, y que se produjeron a lo largo de la noche de los días 12 y 19 de abril, y entre las 13.30 y las 16.00 horas del 17 de abril.

Según la denuncia interpuesta por la empresa que había sido contratada para esos trabajos por Cobre San Rafael, el sabotaje le ha supuesto una pérdida de unos 10.500 euros. Además, la empresa insiste en su comunicado que el rechazo al Proyecto Touro parte de colectivos concretos, "que en absoluto son representativos del sentir mayoritario de la comarca". En este sentido, insisten en sus argumentos de que el proyecto es respetuoso con el medio ambiente y de que contratarán a 400 personas.

Montserrat Prado

La diputada autonómica del BNG, Montserrat Prado, se refirió también al controvertido proyecto. La cambadesa pidió a la conselleira do Mar, Rosa Quintana, que se ponga del lado del sector del mar, "que da empleo a 30.000 familias en la ría de Arousa", y recordó que según Augas de Galicia todos los ríos situados en un radio de 65 kilómetros de la antigua mina están hoy en día contaminados.