La asociación de comerciantes Cambados Zona Centro emitió ayer un comunicado en el que enmiendan la plana al concejal de Tráfico, José Ramón Abal.
Éste afirmó hace menos de una semana que el 65 por ciento de los propietarios de bares o comercios de la Rúa Real aprobarían un eventual cierre al tráfico de dicha vía durante los meses de julio y agosto. Pero Zona Centro replica que eso no es verdad, y de hecho aluden al escrito promovido por un hostelero de la zona, que presentó la semana pasada en el Ayuntamiento, y que firmaban 11 de los 17 negocios existentes en la Rúa Real.
El comunicado de la asociación de comerciantes es contundente, y apuntan en él que "la mayoría de los negocios de la Rúa Real se oponen al cierre al tráfico" de dicha vía, salvo ocasiones puntuales. "Entendemos y apoyamos el hecho de que puntualmente, en función de las actividades previstas, y atendiendo principalmente a la seguridad del público previsto, se tenga que realizar el corte puntual de ésta o de otras calles".
Pero algo muy distinto es plantear una peatonalización de la Rúa Real o de la plaza de Fefiñáns durante dos meses enteros, como sugería José Ramón Abal. Sobre esto, la asociación de comerciantes arguye que el criterio mayoritario entre los empresarios de la zona no ha variado. "La mayoría son partidarios de que se mantenga abierta al tráfico la Rúa Real".
A este respecto, Zona Centro alude al escrito que presentaron hace una semana un grupo de hosteleros y comerciantes, "en el que se pone de manifiesto su oposición al cierre total o temporal (durante los meses de julio y agosto) del tráfico en la Rúa Real".
El colectivo de comerciantes que dirige Juan Rey añade que "entendemos que una medida de este calado (una eventual peatonalización) se debe tomar de forma transparente y consensuada con los principales interesados".
"Por ello creemos conveniente que la toma de este tipo de decisiones debe ser debatida y consensuada en una reunión conjunta con todos los afectados", añade Zona Centro. Con esta petición de reunión conjunta atacan otro de los argumentos de José Ramón Abal, que apostó desde un primer momento por los encuentros individuales con los hosteleros y comerciantes, al considerar que de ese modo serían más sinceros en sus respuestas.
En lo que respecta al escrito presentado la semana pasada por los representantes de los negocios, pedían también "una reunión conjunta", y manifestaban "nuestra total disconformidad y rotunda oposición ante una posible peatonalización, ya sea ésta de carácter temporal, durante los meses de verano o definitiva. Consideramos que dicha medida perjudicaría gravemente los intereses de nuestros negocios, viéndonos abocados al cierre de la actividad en la mayoría de los casos".
El escrito lo firman 11 de los 17 negocios, aunque dos de ellos los regenta la misma persona, con lo que en la práctica son 10 firmas.
La eventual peatonalización temporal de la Rúa Real y de la plaza de Fefiñáns amenaza así con convertirse en un auténtico quebradero de cabeza para Abal. Incluso queda por ver si sus gestiones no desembocarán en otra crisis política en el cuatripartito, pues Abal abordó el asunto sin consultar con el concejal delegado de Comercio, Xurxo Charlín, con quien ya tuvo graves roces en el pasado porque supuestamente éste último se había inmiscuido en competencias suyas.
