La asociación de nais e pais de alumnos, Anpa, del colegio "Rosalía de Castro" de Carril aún no ha recibido la analítica completa de las muestras de agua recogidas por Sanidade en la última semana del mes de febrero. Tampoco se conoce el resultado de la muestra instada por la jefatura territorial de Educación al mismo organismo, calificada como contra análisis para determinar las responsabilidades en relación con la denuncia por la turbidez con la que sale de los grifos del centro escolar.

La Anpa denuncia que las tuberías del colegio de Carril son viejas y están en mal estado, así como los cuartos de baño, que son de la época en que se construyó hace 47 años, y reclama la ejecución de obras para adaptar las instalaciones escolares a la normativa actual en materia sanitaria. El Concello, que envió un técnico a revisar las instalaciones, indica que no se trata de trabajos de mantenimiento (que son de su responsabilidad), sino de obras de rehabilitación que corresponden a la Consellería.

La jefatura de Educación envió una orden al colegio para que dejaran de utilizar el agua que sale de los grifos para beber mientras no se conozcan los resultados de las analíticas. Desde entonces los niños beben agua embotellada que suministra el Concello de Vilagarcía.