Hoy se celebra la festividad de la Candelaria y San Blas. Según la tradición y las leyendas es la fecha elegida para que se "casen" los pájaros. Pero es también el Día Mundial de los Humedales; jornada en la que administraciones públicas y colectivos ecologistas y conservacionistas pretenden llamar la atención sobre el estado de estas zonas vitales para el desarrollo de la flora y la fauna.
Mientras en localidades como O Grove tratan de dar a conocer su importancia, entidades como la Sociedad Española de Ornitología (SEO/BirdLife) inciden en la necesidad de aplicar medidas de recuperación y protección.
En esta entidad aluden al estado de los humedales de importancia internacional para las aves acuáticas, es decir, espacios protegidos por el convenio de Ramsar como los existentes en la localidad meca.
La conclusión a la que llega la organización ornitológica es que "todos los espacios estudiados están expuestos a presiones 'altas' o 'muy altas', lo que provoca que más de la mitad de los humedales Ramsar del país se encuentren en un estado de conservación 'pobre' o 'muy pobre' según la calidad del hábitat que precisan sus poblaciones de aves".
En el caso concreto de la Reserva Ornitológica O Grove, que gestiona SEO, el Complejo Intermareal Umia-O Grove o el Complejo Ons-O Grove, cabe resaltar que las zonas húmedas resultan especialmente relevantes en esta época del año para unas 13.000 aves.
Son zonas de importancia internacional para la invernada y migración de la espátula común, pero también de importancia nacional para la invernada del ostrero euroasiático, el chorlito gris, el correlimos común y la aguja colipinta.
Aunque son muchas más las especies presentes, situándose también entre las invernantes la garceta común, el colimbo ártico, colimbo grande, paíño europeo, chorlito dorado europeo, zarapito real, archibebe claro, charrán patinegro, silbón europeo, correlimos común, ánade rabudo, arao común, cerceta y chorlitejo grande.
Se aprovechan de la existencia de bancos de arena cubiertos por una muy pequeña capa de agua marina, estuarios, llanos fangosos y arenosos que quedan al descubierto en bajamar, lagunas costeras, pastizales salinos atlánticos, dunas -tanto móviles embrionarias como blancas o grises-, prados húmedos mediterráneos de hierbas altas, brezales secos atlánticos costeros, brezales secos europeos y grandes calas y bahías poco profundas, entre otros hábitats.
De ahí la presencia, también, de aves permanentes como el ánade real, pato cuchara, gaviota patiamarilla, cormorán moñudo y la focha común. Además de otras especies consideradas "de paso", aunque algunas prefieran el mar abierto a a los humedales. Es el caso del fumarel común, pardela balear, polluela pintoja, charrán común, charrán patinegro o pardela cenicienta.
Ni que decir tiene que todo esto demuestra la importancia de los humedales de O Grove, de lo que también se informó ayer a un grupo de 26 alumnos del colegio Florida de Sanxenxo que se reunieron en el Aula da Natureza de Siradella (O Grove) a instancias de la Consellería de Medio Ambiente.
Con esta propuesta, y otra similar celebrada en el Parque Natural de Corrubedo (Ribeira), la Xunta quiso "sensibilizar a la sociedad sobre los valores de estos espacios y sus beneficios para la naturaleza".
La directora xeral de Patrimonio Natural, Ana María Díaz, entregó a alumnos y profesores un diploma que los acredita como "Embajadores de los humedales".
