Ahora sí que puede darse por terminada la vendimia -y la revendimia- en las bodegas de la Denominación de Origen Rías Baixas. A falta de los ajustes que pueda realizar el Consello Regulador puede decirse que la recolección se cerró con un registro espectacular de más de 39 millones de kilogramos de uva; frente a los 33,4 millones del año pasado o los 32 millones de kilogramos obtenidos en la campaña de 2015.

Se confirma por tanto que se trata de la segunda cosecha más importante en la historia de esta Denominación de Origen -solo superada por la de 2011, con 41,8 millones de kilos-, y aunque finalmente no pudo alcanzarse la barrera de los 40 millones, también es cierto que se superaron con creces los 35 o 36 millones que se barajaban como previsión inicial.

"Campaña fantástica"

Este es el fruto de una campaña espléndida que se vio claramente beneficiada por la condiciones meteorológicas; las cuales también respetaron las operaciones de recolección y que, en consecuencia, contribuyeron a marcar este registro histórico que ya pronosticaba hace dos meses Isidoro Serantes, gerente de la bodega Bouza do Rei (Ribadumia).

Ayer el propio bodeguero confirmaba que "ha sido una vendimia fantástica" y resaltaba que "la calidad de la uva fue excelente, por lo que vamos a poder elaborar unos vinos my buenos que, sin duda, serán del agrado del consumidor".

La suya es una de las bodegas que contribuyeron a marcar el ritmo en el conjunto de Rías Baixas, y muy particularmente en la subzona productora de O Salnés, donde se rozaron los 26 millones de kilos de uva.

Respecto a las demás comarcas, Condado do Tea se queda en aproximadamente 8,5 millones de kilos, mientras que O Rosal introdujo en bodega 4,5 millones.

Ya de un modo más testimonial completan la relación las subzonas de Ribeira do Ulla, con 447 toneladas de uva, y Soutomaior, que se quedó ligeramente por debajo de las 75 toneladas.

De los 39.162.690 kilos de uva que figuraban oficialmente registrados hasta ayer en el Consello Regulador, nada menos que 37.849.563 kilos correspondían a la variedad albariño. Muy lejos están los 366.000 de treixadura, 299.455 kilos de caíño blanco, los 290.390 de loureira blanca, 70.207 de sousón y los 67.604 de godello.

Pero también puede hablarse de 17.674 kilos de torrontés, 5.662 de pedral, una cantidad similar de loureira tinta, 7.696 de castañal y 21.607 kilogramos de uva brancellao.

Para entender mejor lo que significó esta vendimia en cada una de esas áreas de producción pueden resumirse a continuación los datos en poder del Consello Regulador Rías Baixas:

| O Salnés. En esta comarca se recogieron 25.519 toneladas de albariño, 11,6 de caíño blanco, 37 del tinto, 14 de espadeiro y algo más de 24 toneladas de mencía.

| Condado do Tea. En este caso hay que hablar de casi 8.000 toneladas de uva albariña, 12 de espadeiro, 81 de loureira blanca, 53 de mencía, casi 56 de sousón y 14 toneladas de torrontés.

| O Rosal. Se recogieron 3.882 toneladas de albariño, 276 de caíño blanco, 60 de godello, 204 de loureira blanca, 11 toneladas de sousón y casi 114 toneladas de treixadura, entre otras variedades.

| Ribeira do Ulla. Fueron 428 toneladas de albariño, 5 de caíño blanco, casi 7 de mencía y otras tantas de treixadura.

| Soutomaior. El balance en esta subzona pontevedresa es de casi 69 toneladas de variedad albariña y 3 de sousón, correspondiendo la cantidad restante a especies como el espadeiro y el pedral.