Cuando el alcalde de Meis recorría su municipio se encontraba "enormes galpones tirados en el suelo y encima de coches, árboles arrancados de forma inexplicable y grandes muros de piedra tumbados en el suelo". Por eso José Luis Pérez concluye que "es una auténtica catástrofe". Esto lo lleva a decir que "hay que ayudar a esta gente de alguna manera, y vamos a contactar con la Xunta para que nos diga cómo podemos hacerlo".