La vendimia está definitivamente lanzada en la Denominación de Origen Rías Baixas, especialmente ahora que la práctica totalidad de las bodegas se han sumado a las operaciones iniciadas hace ya dos semanas.

El empujón definitivo lo dan las grandes firmas vitivinícolas del sector, entre las que cabe destacar a la cooperativa Condes de Albarei (Cambados), de la que depende también la bodega Pazo Baión.

En este último caso la vendimia, iniciada ayer, se sigue además con atención especial por el valor que tiene desde un punto de vista social. Hay que tener en cuenta que entre las aproximadamente sesenta personas que se dedican a la recolección en los viñedos de este pazo de Vilanova hay una decena de jornaleros que forman parte del programa de reinserción desarrollado por Condes de Albarei desde la compra de Pazo Baión en 2008.

Como se explicó en otras ocasiones "la selección de estos trabajadores se hizo de común acuerdo entre la Consellería de Sanidade y la bodega, empleando criterios totalmente objetivos como la evolución y estabilidad en su tratamiento y su adecuación a los requisitos que supone el puesto de trabajo".

Estos temporeros que ahora recogen uva en el pazo que un día fue símbolo del narcotráfico en Galicia ya no consumen drogas, siendo ésta una condición que deben cumplir de forma estricta si quieren formar parte de la vendimia en Pazo Baión.

Y no es la contratación de estas personas la única forma que tiene Condes de Albarei de colaborar en la causa, ya que cada año dona el cinco por ciento de la facturación de Pazo Baión a programas de prevención y atención a drogodependientes.

Unos y otros, tanto los temporeros del programa de reinserción social como los demás vendimiadores de Pazo Baión, van a ocuparse durante esta semana y la que viene de la recolección de una uva "en perfecto equilibrio" en cuanto a graduación y acidez que presenta una "excelente calidad".

Coincidiendo con lo apuntado por los expertos y bodegueros consultados en días previos, en Pazo Baión coinciden al destacar que se trata de una recolección "muy selectiva" y escalonada que cuenta con la ventaja del buen tiempo reinante, ya que sin amenaza de lluvia es posible avanzar poco a poco entre viñedos.

En el caso concreto de Pazo Baión "el grado de maduración óptimo varía de unas parcelas a otras" dentro de la misma finca, y todo debido a "su forma de anfiteatro". Lo que pretenden hacer es recoger la uva a medida que mejoren las condiciones de cada una de las parcelas del terreno.

De este modo será posible elaborar el albariño Pazo Baión "a partir de una adecuada selección de uvas y de los mostos flor", dando como resultado un blanco "de alta calidad y gran tipicidad en el que se exprese nítidamente el terroir -el conjunto de factores que definen y describen la zona geográfica en la que se emplaza el viñedo- que es la esencia de nuestro albariño".

También comenzó la vendimia, en este caso el domingo -doce días más tarde de lo que sucedía el año pasado-, en bodegas La Caña, integrada en el Grupo Jorge Ordóñez y con viñedos en Vilagarcía.

En esta empresa aseguran que "la uva está en plenitud y muy sana, con 13 grados de alcohol y 9 de acidez, uno más que el año pasado". Las mismas fuentes aclaran que el objetivo es aumentar más de un 10% la producción del año pasado para llegar a cerca de 300.000 kilos de uva.

Grupo Jorge Ordóñez produce dos vinos cien por ciento albariños, como son "La Caña" y "La Caña Navia", que están encontrando una buena acogida en el mercado de Estados Unidos.

También vendimian desde el lunes, sumándose así al grueso de las bodegas de la Denominación de Origen Rías Baixas, es en Bouza do Rei (Ribadumia), donde esperan recoger alrededor de 1,3 millones de kilos de una uva "de excelente calidad", según insiste su gerente, Isidoro Serantes.

La Denominación de Origen Rías Baixas asume el inicio de la vendimia, que en realidad comenzó hace dos semanas. A estas alturas se han recogido ya cerca de 10 millones de kilos de uva "con un excelente estado fitosanitario" en las 140 bodegas en funcionamiento hasta ayer, para un total de 183 adheridas.

El director técnico de Rías Baixas, Agustín Lago, explica que "las lluvias de la pasada semana fueron beneficiosas para el viñedo" y que "las expectativas son muy halagüeñas", dado que las actuales previsiones meteorológicas permitirán "que la vendimia se realice de manera escalonada, ordenada y selectiva".

A este respecto, Lago señala que "las primeras partidas de uva se han destinado a la elaboración de los vinos espumosos, luego se han incorporado a la recogida las variedades blancas y, por último, se vendimiarán las uvas tintas".

Desde el Consello Regulador aprovechan para anunciar que para esta campaña se movilizan 26 auditores "que se responsabilizan del seguimiento de la vendimia en las bodegas, los viñedos y los transportes, asegurándose de que se cumplen las normas recogidas en el pliego de condiciones".

También es de destacar que "el sector está cada vez más profesionalizado y comprometido con la excelencia, lo que facilita el trabajo de los auditores y redunda en la calidad de los vinos". Para mejorar el control "cada operador primario inscrito dispone, para su identificación, de una tarjeta personal e intransferible y, por primera vez, los viticultores asociados pueden acceder desde cualquier dispositivo (PC, tablet o smartphone) a un espacio web, www.gdoriasbaixas.com, donde disponen de información, como su listado de parcelas, datos de entregas de uvas y normativa en vigor".