El estanco número 3 de O Grove, en el número 27 de la calle Alexandre Bóveda, se suma a la ya larga lista de negocios o propiedades asaltados en los últimos meses. Aunque ya no es novedad, puesto que lo atracaron hace unos años.

La nueva oleada de robos afecta esta vez al negocio de Rubén Meis, quien explica que, afortunadamente, los cacos se llevaron menos de lo previsto, "quizás porque se asustaron al saltar la alarma".

Cifra en "alrededor de 1.400 euros" las pérdidas ocasionadas por la acción de los ladrones, que la emprendieron con este estanco en la madrugada de ayer, al igual que en semanas previas sucedió con otro tipo de negocios y también con vehículos estacionados en diferentes calles.

"En el cuartel nos dijeron que últimamente se están intensificando los robos y que está siendo una temporada intensa, tanto para los coches como para tiendas de ropa y otros negocios", explicaba Rubén Meis tras presentar la correspondiente denuncia por el asalto a su local, en el que se llevaron tanto dinero en metálico como cartones de tabaco. "La intención que tenían era llevárselo todo, pero no pudieron", explica el estanquero.

Este tipo de sucesos causan la lógica preocupación de los ciudadanos, que últimamente parecen ir a más debido a lo que muchos consideran "una excesiva inseguridad ciudadana". En estos casos se reabre también el debate sobre el papel que desempeña la Policía Local, sobre todo en horario nocturno.