El Ministerio Público plantea que el gerente del club de alterne de A Goulla cometió un delito "contra los derechos de los trabajadores", y que "como consecuencia del impago de las cuotas, la Tesorería de la Seguridad Social sufrió unos perjuicios económicos". Por ello, la fiscal también solicita que el acusado se haga cargo de las costas del juicio y que abone -él o la empresa responsable del club- las cuotas no sufragadas a la Seguridad Social, y que tendrá que determinar precisamente dicho organismo público.

Asimismo, el acusado se enfrenta también a una petición de multa de ocho meses a razón de ocho euros diarios, lo que hace un total de casi 2.000.