La sombra del "enchufismo" planea sobre la Festa do Marisco de O Grove, o al menos sobre alguno de los procesos de selección de personal abiertos. El más llamativo, según indican en el PP local, es el que tiene como protagonista "al secretario de organización del PSOE, que también ocupó un puesto en la lista en las pasadas elecciones y tiene un parentesco familiar con el alcalde". Ahora salta a la palestra porque "se hizo con la adjudicación del servicio de cafetería".

Se refieren los conservadores a Francisco Álvarez Sanmartín, popularmente conocido como "Pacucho". Tiene 40 años, es diseñador de interiores, ejerce en ocasiones como monologuista y/o humorista y forma parte de la ejecutiva local socialista desde 2013.

Francisco Álvarez ejerció como secretario de organización entre 2007 y 2012 -no consta su relevo-, según se explicaba en el programa del PSOE que le llevó a ganar las municipales de mayo, a las que "Pacucho" concurrió con el número 9. Y por tanto estuvo a punto de convertirse en concejal -aún está a tiempo de serlo, si se produce alguna baja durante el mandato-, ya que el grupo socialista logró la victoria y la Alcaldía tras obtener ocho actas en la Corporación.

A Francisco Álvarez se le presentaba entonces desde su partido como un hombre "vinculado a la actividad cultural de O Grove en todas sus facetas, colaborando activamente en la organización de eventos culturales y en la dinamización social del Concello".

Ahora algunos creen que incluso puede ocuparse directamente de la gala de entrega de los Centollos de Oro u otras actividades a desplegar en el evento gastronómico que arranca el día 1. "Pero aunque se avecinan situaciones igual de vergonzosas, de las que ya hablaremos, lo que está demostrado ahora mismo es que este hombre, que además está casado con una hermana de la mujer del alcalde, se ha llevado el servicio de cafetería que va a funcionar en la fiesta".

Esgrimen los conservadores que "es algo vergonzoso y carente de toda ética, aunque es algo a lo que tendremos que acostumbrarnos, ya que todo el mundo sabe que en la anterior etapa de Cacabelos como alcalde ya tenía predilección por la entrega de contratos o proyectos al despacho de arquitectos en el que trabajaba su hermano".

Lo que sucede ahora, argumentan en el equipo del conservador Miguel Pérez, es que el primer edil "ya no tiene reparos de ningún tipo, por eso recurre a su cuñado y hombre de confianza en el partido para encargarse de la cafetería".

En el PP señalan que "incluso puede que Francisco Álvarez ganara legalmente el concurso, pero se trata de una desfachatez, y lo que tendría que haber hecho era no presentarse al mismo".

En las filas populares terminan diciendo que "todo esto resulta un tanto sospechoso, y José Cacabelos no debió haberlo consentido, pero mucho nos tememos que pronto saldrán a la luz otros problemas y escándalos semejantes".