La sentencia del Tribunal Superior de Xusticia de Galicia (TSXG) que da la razón a la APLU y, en consecuencia, deja las puertas abiertas al posible derribo de la caseta vecinal de O Sineiro, no ha sido analizada ni valorada aún desde el tripartito. No obstante, para entender la postura del ejecutivo pueden recordarse ahora los planteamientos hechos públicos hace un año por el alcalde, Miguel Pérez, y su socio de gobierno, Alfredo Bea, ya que ambos defendían la legitimidad y legalidad de la construcción.

La defensa municipal

"La caseta se sitúa en suelo urbano consolidado, de ahí que se defendiera su continuidad", indicaban entonces en el Concello, donde tras conocer que el Juzgado de lo Contencioso les había dado la razón -hace un año- declaraban que con aquella sentencia se confirmaba "que la instalación se ajusta a los parámetros establecidos".

Aquella sentencia del Contencioso instaba a la Administración local "a legalizar la obra", y Pérez explicaba que esa legalización iba a hacerse realidad porque la caseta "es importante para el interés vecinal". Pero un año después el TSXG tira por tierra aquellos argumentos al aceptar el recurso de la APLU.

Cabe recordar, igualmente, que hace un año el Partido Galeguista Demócrata (PGD) se posicionó públicamente para felicitarse por la resolución del Contencioso que salvaba la caseta, construida cuando su portavoz, Alfredo Bea, también formaba parte del gobierno, al lado del socialista José Cacabelos. "Evidentemente apoyamos este local social porque lo consideramos necesario, y por tanto nos satisface que sea legalizable", manifestaba entonces Alfredo Bea.