Otro de los temas candentes en la actualidad municipal es la reorganización de la plantilla de Ravella, que ha provocado una nueva brecha entre gobierno y sindicatos, dedicándose acusaciones mutuas. La segunda propuesta del Ejecutivo pone de manifiesto que las brigadas estarán formadas por siete empleados, que trabajarán una semana de lunes a domingo: de lunes a viernes en horario de 15,00 a 22,30 horas y el fin de semana de 7,30 a 15,00 horas. Descansarán lunes y martes y cobrarán 15 euros por "cada jornada ordinaria que coincida en domingo tanto a personal funcionario como al laboral". Entrar a formar parte de las brigadas de tarde y fin de semana "preferentemente será voluntario", reza la propuesta municipal. Pero lo cierto es que teniendo en cuenta que la única ventaja es cobrar 15 euros a mayores por trabajar cinco días seguidos de tarde y luego continuar con el fin de semana, parece poco probable que los trabajadores puedan preferir este horario al habitual: de lunes a viernes de 8,00 a 15,00 horas. Por tanto las brigadas serán rotatorias.

Dos de las novedades de esta segunda propuesta en relación a la primera son, por una parte, que como coordinador de la brigada podrán ejercer tanto encargados como también ayudantes, es decir, operarios, y por la otra, que "la asignación de tareas al personal que forme parte de la brigada será acorde con su puesto".