La Comunidade de Montes Veciñais en Man Común de San Martiño de O Grove va a fomentar la repoblación de sus propiedades con castaños micorrizados. Es decir, van a plantar árboles inoculados para favorecer el nacimiento de hongos, tal y como se hizo en la isla de A Toxa.

De este modo no solo se repueblan los montes y se apuesta por las especies autóctonas, sino que se genera mayor riqueza en las parcelas comunales y se fomenta la micología.

Esta acción iba a llevarse a cabo en enero, pero fue paralizada, supuestamente a causa del mal tiempo reinante. Pero en realidad todo parece indicar que se trataba de esperar el cambio en la junta directiva, y va a ser ahora cuando, por fin, se retome el plan y se afronte la plantación.

Para entender mejor esta nueva propuesta hay que tener en cuenta tres aspectos o situaciones muy concretas. En primer lugar, hace meses se impulsó la repoblación de A Toxa y el concejal de Medio Ambiente, Alfredo Bea García, puso la plantación de árboles micorrizados como un ejemplo a seguir por las comunidades de motes de la localidad.

En segundo término, a principios de enero los comuneros de San Martiño dirigieron un escrito al gobierno local pidiendo su colaboración en actividades de repoblación para introducir especies autóctonas micorrizadas e implicar a los centros de enseñanza, pues se apostaba por reunir a los escolares para que colaboraran en la plantación y se concienciaran sobre la necesidad de preservar el medio ambiente.

Y en tercer lugar, el sábado pasado se celebró una asamblea en la que Francisco Meis Durán, el técnico municipal de Medio Ambiente y uno de los impulsores de la plantación de árboles micorrizados en A Toxa, fue elegido presidente de los comuneros de San Martiño.

Tras aquella asamblea el flamante presidente comunal ya anunció su intención de repoblar los montes, de impulsar la plantación de especies autóctonas micorrizadas y de favorecer el acercamiento de la sociedad a las propiedades comunales, dejando las puertas abiertas a la implicación de los vecinos -y los niños en particular- en todo tipo de actividades.

Pues bien, si se combinan esas tres claves aludidas se obtiene un proyecto de ejecución inmediata para plantar castaños micorrizados en montes comunales de San Martiño con ayuda de un buen número de escolares grovenses.

La actual época del año es buena para realizar este tipo de plantaciones, y no es conveniente esperar mucho más. Por esta razón, en próximos días deberían darse a conocer las claves de los nuevos proyectos de la comunidad de montes, en lo relativo a las repoblaciones con plantas inoculadas con hongos comestibles. De este modo va a ser posible mostrar a los niños nuevas fórmulas de aprovechamiento del monte, pero también informarles sobre la protección del suelo y los recursos hídricos, al tiempo que se favorece el uso recreativo, deportivo y didáctico de los terrenos comunales.

Francisco Meis Durán, cabe recordar, quiere dar a conocer los valores ecológicos, culturales y económicos de los terrenos comunales, y campañas como la plantación de árboles micorrizados por parte de alumnos grovenses es un primer paso, pero no será el último.

No está de más recordar que al micorrizar los árboles se busca la simbiosis entre los hongos y las raíces de las plantas, para que éstas -en este caso castaños gallegos- puedan crecer mas rápido y más sanas, al tiempo que se favorece el nacimiento en los troncos de setas silvestres.

Hay que reiterar que, según los técnicos, el procedimiento debe efectuarse en un bosque joven o en un proceso de plantación de árboles -especialmente castaños-, que al estar micorrizados actúan "acoplando con su micorriza a las demás. Incluso es posible micorrizar artificialmente la planta existente con inóculo, lo cual permite acelerar el proceso y obtener cosechas regulares, dando a las plantas una mayor calidad de vida en ese medio, con un mejor crecimiento, un estado más sano y una mejor producción de castañas, siempre que cumplan unas determinadas condiciones silvícolas".