La Corporación provincial echó de menos a Jorge Domínguez. Ayer se celebró el pleno de diciembre y las referencias al que durante 21 años fue alcalde de Meaño eran obligatorias pues por vez primera, en la historia de la Diputación, fallece uno de sus miembros en ejercicio.

Rafael Louzán, presidente de la institución, anunció que en enero se celebrará un homenaje en su memoria en su villa natal y volvió a recordar las cualidades que le caracterizaban.

"Va a haber un acto en su pueblo natal porque es una persona que ha representado mucho para sus vecinos", manifestó.

También hizo hincapié en la enorme vitalidad que siempre demostró Jorge Domínguez Rosal, incluso en la etapa en que su salud se había degradado de forma muy considerable.

El alcalde de Meaño murió el pasado 20 de noviembre al no superar un cáncer de pulmón que se le detectó dos años antes.

Llevaba 21 años de alcalde y algo más de año y medio como diputado provincial de Pontevedra, una responsabilidad que no estuvo exenta de polémica.

Cuando fue elegido, Domínguez ya había sido sometido a diversas intervenciones quirúrgicas y tratamientos oncológicos, pero aún así prefirió continuar activo casi hasta la última semana de vida.

La pasada semana, la corporación municipal eligió a Lourdes Ucha como alcaldesa.