La supresión de las duchas en playas como A Lanzada genera división entre los usuarios. Algunos se contentan con los lavapiés instalados por el Concello de O Grove, que de este modo trata de ahorrar consumo, y por tanto, dinero. Pero hay bañistas que consideran que disponer de ducha es una necesidad esencial, y lo creen un servicio básico en una playa de bandera azul, mientras que otros dicen comprender que se recorten gastos, sobre todo en los tiempos que corren.
Para empezar, hay que recordar que la normativa para las playas de bandera azul no obliga a instalar duchas. Muy por el contrario, aconseja la adopción de medidas respetuosas con el medio ambiente y la conservación de un bien tan preciado como el agua.
El Concello explicó en su día que con el cierre de las duchas de A Lanzada el consumo estival de agua en ese arenal bajó de más de 6.000 metros cúbicos –en verano de 2010– a los 2.784 metros cúbicos del verano pasado, por lo que se pretende repetir y mantener el consumo de este verano en torno a la barrera de los 3.000 metros cúbicos.
Las quejas
Aclarado esto, diversos bañistas que frecuentan A Lanzada u otras playas con bandera azul, explicaron en los hoteles en los que se alojan, y también a los socorristas, que "eliminar las duchas es un error".
Creen que "es un servicio que debe mantenerse", y en el caso concreto de A Lanzada apuntan que "algunos incluso hemos decidido empezar a bañarnos en la parte de A Lanzada que corresponde a Sanxenxo", si bien es cierto que ese espacio, aunque sí disponga de ducha, carece de otros servicios que sí aporta el margen grovense.
También se quejan algunos vecinos de O Grove, que insisten en que "las duchas son necesarias en las playas, porque así ya podemos regresar a casa duchados y no necesitamos gastar agua en nuestros domicilios".
Podría citarse, del mismo modo, a algunos hoteleros que se quejan por la carencia de duchas y las consideran "un servicio extra" para sus clientes.
A favor
Pero, como queda dicho, en los puestos de socorro, la oficina de turismo, hoteles y bares se escuchan opiniones para todos los gustos.
Tanto a pie de playa como en sus hoteles hay turistas que dicen comprender la carencia de duchas y apuntan que "con la existencia de lavapiés es suficiente".
Los hay que señalan, igualmente, que "hay playas en otras localidades que también tienen bandera azul y no solo carecen de duchas, sino que tampoco disponen de lavapiés".
Esto sucede tanto en arenales de O Grove y la comarca como en otras zonas de baño de la provincia y de toda Galicia. Hay casos realmente llamativos, en los que antiguamente había una buena cantidad de duchas y/o lavapiés y donde en la actualidad han desaparecido por completo.
Muchos de los usuarios consultados conocen la situación y dicen entenderla. Otros opinan que "la crisis hace que los recortes lleguen a todas partes, y si se puede ahorrar con el agua hay que hacerlo", e incluso hay vecinos de O Grove que opinan que "las arcas municipales no tienen por qué pagar el agua a los turistas de toda España que se acercan a nuestros arenales".
La relación de críticas u opiniones es tan amplia como la de propuestas, pues hay usuarios que proponen que incluso se quiten los lavapiés de A Lanzada, como los hay que reclaman un cambio de postura por parte del Concello de O Grove, sin descartar a los que opinan que pueden implantarse sistemas de copago, "de forma que se instalen duchas que puedan funcionar con monedas de 50 céntimos o de un euro para que solo viertan agua durante un tiempo limitado".
Estos planteamientos y otros muchos no pasan desapercibidos a los empresarios del sector turístico ni a las autoridades locales. "Hay que sopesar todas las propuestas, pero también hay que ser responsables y racionalizar el consumo de agua", explican en el tripartito grovense, donde, en cualquier caso, no temen que el cierre de duchas implique una pérdida de bañistas en A Lanzada y demás arenales de bandera azul.
"Es lógico que algunos se quejen, pero hay que pensar en el bien común y el interés general, por eso consideramos que son muchos más los que entienden la eliminación de duchas", concluyen en la administración local, donde, en cualquier caso, manifiestan que "con duchas o sin ellas, A Lanzada es la principal playa de Galicia, y eso se comprobó durante los últimos días, cuando a pesar de ser jornadas laborables este arenal ha estado completamente lleno de bañistas, y algo parecido ocurrió en las demás".
Los socorristas reciben elogios
Una consulta realizada en diferentes hoteles de O Grove para saber qué opinan sus bañistas, tanto de la supresión de duchas como de los servicios que ofrecen A Lanzada y otras playas, permite indicar que la satisfacción es generalizada respecto al servicio de salvamento y emergencias.
Los socorristas ejercen de mediadores, orientadores turísticos y, como es lógico, son los encargados no solo de izar las banderas verde, amarilla o roja, en función del estado de la mar, sino también de atender a bañistas afectados por picaduras, contusiones, heridas y demás problemas que puedan presentarse.
El servicio de emergencias y la unidad marítima de Protección Civil de O Grove parecen estar bien vistos entre los usuarios, y aunque siempre se producen quejas, el respaldo parece importante.
En este sentido, hay que destacar que Víctor Otero Prol, jefe de Protección Civil, y Alfredo Bea, concejal de Seguridad Ciudadana, han hecho especial hincapié no solo en la necesidad de que los socorristas ejerzan con profesionalidad las funciones de emergencias y salvamento que tienen encomendadas, sino que los han orientado como una especie de transmisores de la imagen turística de O Grove y de los valores medioambientales de las playas y su entorno. Un ejemplo, como se indicó en su momento, fueron las consignas dadas a los socorristas para proteger una especie amenazada como el chorlitejo patinegro, que anida en algunas playas muy concurridas.
