El informe sobre la situación económica del Concello de Vilagarcía y el resultado de la liquidación del presupuesto de 2010 permiten al gobierno municipal, que preside Tomás Fole, constatar la gravedad de la situación y la necesidad de tomar medidas urgentes para sanear las arcas de Ravella. El alcalde y el concejal delegado de Economía e Facenda, José Manuel Pardal, confirmaron ayer que en lo que queda de año solo se puede garantizar el pago de los sueldos y de los servicios mínimos para no incrementar el saldo negativo del remanente de tesorería que ya suma 3.804.000 euros en números en rojo.

En su comparecencia para informar sobre los datos económicos municipales, el regidor comenzó con los datos positivos como es el caso de que, gracias al esfuerzo del departamento de Tesorería, por primera vez desde hace muchos años el Concello de Vilagarcía presenta al Consello de Contas, en tiempo y forma (antes del 31 de julio) la liquidación del presupuesto de 2010.

"Agradecemos el gran esfuerzo de la Tesorería municipal para cumplir con este plazo, incluso acortando plazos vacacionales. Otro de los compromisos que adquirimos al asumir el gobierno y que cumplimos es la transparencia de nuestras actuaciones. Por lo tanto en el plazo de siete días facilitamos a los grupos de la oposición la información económica necesaria que el bipartito no hizo en tres años. Aunque los datos de las cuentas no estamos obligados a darlos hasta la aprobación de la cuenta general de 2010, que será en octubre, entregamos la información a los grupos políticos representados en la corporación", declaró.

"La situación municipal es grave y se remonta a 2009 cuando se prorrogan por dos años consecutivos los presupuestos. Incluso hubo una guerra interna en el bipartito ya que uno de los socios quería ajustarse a la realidad y el otro pretendía seguir gastando indiscriminadamente. Esto es lo que podemos deducir de los resultados del presupuesto 2010 y del informe realizado para conocer la situación económica", avanzó Tomás Fole para dar paso a la presentación oficial de los datos por parte del concejal de Economía e Facenda, José Manuel Pardal.

"Los datos del resultado del presupuesto de 2010 arrojan un saldo negativo de 1.354.000 euros, lo que crea un desequilibrio ya que se trata de la diferencia entre los pagos reconocidos y los ingresos. Otra de las magnitudes importantes es el remanente de tesorería que muestra la capacidad de endeudamiento municipal. Este arroja un saldo negativo de 3.804.000 euros cuando en el año 2007 era de 1.500.000 euros positivos", expuso el edil de Facenda.

Pardal explicó que este importante déficit se produce a partir de la decisión del bipartito de prorrogar los presupuestos municipales, presentando un 2009 un saldo negativo de 500.000 euros que se fue acumulando en los siguientes ejercicios económicos. "Partimos de un nivel de ingresos irreal y continuamos con ese mismo presupuesto. En 2011 sigue incrementándose la diferencia negativa porque continuamos con los presupuestos prorrogados", manifestó el concejal.

En base a estos datos José Manuel Pardal explicó que el remanente de tesorería en 2009 bajó un 223%, por lo que el deterioro de la economía municipal ya fue muy alto en un solo ejercicio. También hay déficit en la capacidad de financiación. Este es de 1.400.000 euros porque los gastos son superiores a los ingresos.

"El volumen de endeudamiento es del 87%, cuando el límite que marca la ley es del 75%, lo que imposibilita poder acudir a nuevos préstamos externos para sanear el remanente de tesorería negativo. Además el presupuesto de 2011 en junio, cuando entramos en el gobierno municipal ya estaba ejecutado en más de un 75%, lo que nos deja muy poco margen de maniobra para el resto del año, con el agravante de que si ejecutamos la totalidad del mismo el remanente de tesorería negativo seguirá incrementándose. Tenemos dinero solo para los gastos fundamentales del Ayuntamiento", puntualizó Pardal.

El concejal de Economía e Facenda reconoció que, aunque el grupo municipal del PP esperaba una mala situación de las cuentas municipales, la magnitud de las cifras del informe económico les ha sorprendido. "No esperábamos que la situación fuese tan grave", expuso.

Fole añadió que "ahora tenemos dinero para pagas los salarios del personal y los servicios mínimos garantizados por ley. Esto no quiere decir que no se vaya a hacer nada más durante este año, ni que se recortarán los gastos sociales. Estos se mantendrán, pero sí recortaremos en otros de los que podemos prescindir. Por ejemplo, este año hicimos un recorte grande en las partidas de las fiestas para ajustarlas a la realidad de la situación económica del Concello".

En respuesta a las recientes críticas de la oposición, el alcalde manifestó que al PP le valían antes y ahora los informes de los técnicos municipales, pero a otros grupos solo les valen cuando están en el gobierno. "Estamos obligados a decirles a todos los ciudadanos como están las cuentas y hacer un plan de saneamiento. Aquí hay una evidencia clara de cómo no se debe gobernar un Concello. Dejaron unas cuentas desastrosas. En 2008 el ratio de liquidez era del 1,42%. El informe de intervención decía que si nos acercábamos al 1% estaríamos en quiebra técnica, el actual índice es del 0,92%.