El Servicio Preventivo Asistencial de Drogodependencias (SPAD) de O Grove hace balance de sus actuaciones a lo largo del pasado ejercicio, cuando se registraron 74 "inicios o reinicios de pacientes", es decir, cuando se dieron de alta para asistir a diferentes actividades o programas un total de 51 vecinos que demandaban atención por ser consumidores de drogas ilegales y 23 ciudadanos con problemas de consumo abusivo de alcohol y/o tabaco.

Tanto con pacientes nuevos como con otros que ya llevan tiempo recibiendo atención en el SPAD meco, puede decirse que el Programa de Tratamiento con Derivados Opiáceos (metadona) llegó en 2009 a 96 pacientes, mientras que una decena se benefició del Programa de Tratamiento con Antagonistas Opiáceos.

En el Programa Libre de Drogas participaron 81 pacientes, fueron 21 los asistentes al Programa de Tratamiento con Interdictores del Alcohol y 28 los que recibieron atención para superar su dependencia a psicoestimulantes como la cocaína.

Así lo explica la concejala delegada de Sanidade, María de los Ángeles Domínguez Fernández, quien aclara además que el Programa de Incorporación Personalizado, que consiste en ayudar a pacientes con dificultades de inserción sociolaboral, benefició a 21 usuarios del SPAD, a lo que se sumó la atención prestada a otros 24 con el Programa de Actividades Complementarias, mediante el cual se ofrecen "alternativas para la ocupación del tiempo libre con actividades formativas, lúdicas, sociales, laborales o de salud".

En este balance también cabe destacar el trabajo realizado a lo largo de 31 sesiones por parte del Grupo de Tratamiento del Alcoholismo. Y a todo ello hay que sumar acciones como la vacunación contra la hepatitis B o la tuberculosis, el intercambio de jeringuillas y reparto de preservativos, realización de sesiones terapéuticas sobre sexo seguro y educación sanitaria, tramitación de medidas alternativas a la prisión, los programas de prevención de recaídas o el trabajo entre los familiares de los pacientes de la unidad asistencial.

En el Programa Alternativa, destinado a jóvenes de menos de 26 años, se anotaron el año pasado diez jóvenes más. Esta actividad consiste en sustituir las sanciones por posesión o consumo de drogas por la asistencia a sesiones de trabajo formativo-preventivas sobre drogodependencias, causas de conducta de consumo y habilidades sociales.