La IV Feria Internacional de Acuicultura de Galicia ofrece una buena oportunidad para intercambiar experiencias, fomentar relaciones comerciales, presentar todo tipo de avances tecnológicos relacionados con el sector acuícola y, en definitiva, es una herramienta para hacer negocio, tanto dentro como fuera de España.

Se logra a través de las misiones comerciales, con la presencia de expositores como la Agencia Nacional de la Acuicultura de Senegal o con proyectos como Eurofish Acui, en el cual se favorecen los contactos entre las Cámaras de Comercio de Vilagarcía y Pontevedra y empresas de Estados Unidos y Brasil.

La Universidad de Vigo, que presenta diferentes proyectos científicos; la Autoridad Portuaria de Vilagarcía, que muestra los resultados obtenidos y sus planes de futuro; y el Consello Regulador Mexillón de Galicia, que promociona la Denominación de Origen Protegida (DOP) que diferencia al molusco autóctono integran la larga relación de expositores presentes. Entre los que también está Comercial Eloy Rocío Mar (CERMAR), una empresa ubicada en el polígono de Sete Pías (Cambados) que puede considerarse humilde, pero que fue la primera en enlatar mejillones protegidos y diferenciados con la DOP.

Entre los pabellones interiores pueden citarse igualmente los de Consellería do Mar y Xunta de Galicia, pero también los del grupo J.J. Chicolino, al que muchos conocieron a raíz del incendio que el año pasado calcinó algunas de sus naves, en Boiro, pero que es una empresa puntera en la comunidad y una de las "fieles" a Acui.

No faltan en este certamen artilugios submarinos para la vigilancia del fondo de las rías, máquinas para el tratamiento avanzado del agua y otras muchas "invenciones" acuícolas de ámbito internacional.

Al igual que destaca "Acuicook", un proyecto que presenta las múltiples ventajas nutritivas y preparaciones culinarias de los productos acuícolas, como hoy va a demostrar el afamado cocinero Martín Berasategui, uno de los invitados a cocinar en la feria.