El Sindicato Libre de Correos (SL) anuncia su intención de presentar una denuncia por el estado de las instalaciones de la oficina de Correos de Cambados. Así lo avanza su delegado sindical para la provincia de Pontevedra, Guillermo Mesejo.

El SL pretende que el servicio de Inspección de Traballo de la Xunta de Galicia visite de nuevo el local que Correos tiene en la Rúa Nova -no es la primera vez que los representantes de los trabajadores denuncian deficiencias en la oficina- para verificar la falta de aireación y de luz natural, ya que salvo la zona de atención al público, el resto de la oficina es interior y carece de ventanas.

También reclaman que se subsane el mal funcionamiento del aire acondicionado, así como el mal estado de los baños que usan los trabajadores.

Guillermo Mesejo explica que el SL también pretende denunciar la situación de las oficinas de Chapela (Redondela), ya que sus reducidas dimensiones obligan según él a los carteros “a dejar los carritos en los baños”; y de la de Pontecaldelas, situada en un edificio muy antiguo, por lo que las dependencias han quedado obsoletas.

Aplazada la compra

En el caso de Cambados, la dirección de Correos estuvo buscando en su día un local comercial a donde trasladar las oficinas, pero según Guillermo Mesejo se ha aplazado temporalmente el proyecto de compra debido a la actual incertidumbre económica. Esto motiva que, a corto o medio plazo, la sede de Correos continúe en la Rúa Nova.

En esta oficina trabajan en la actualidad 25 personas. Siete de ellos son carteros que se encargan del reparto por el casco urbano y alrededores; otros 13 llevan la correspondencia al rural -incluyendo Meis y Ribadumia-, y el resto es personal de coordinación y de atención al público y oficina.

Mesejo considera suficiente la cifra de trabajadores en la coyuntura actual, en que ha bajado el volumen de envíos, pero lo que él critica es que no se suplen las bajas o permisos que no sobrepasen los tres días.

Eso significa que hay repartidores que tras una ausencia corta se encuentran con que tienen acumulados sus envíos “cuando la ley postal dice que hay que repartir cinco veces a la semana”.

El estado de los locales de Correos todavía es peor cuando se trata de oficinas auxiliares, como la de la plaza de abastos de Dena (Meaño), en la que incluso había goteras, o la de Mosteiro (Meis).

En vísperas del pasado verano, los sindicatos que representan a los funcionarios de Correos iniciaron un periodo de movilizaciones, para protestar por el mal estado general de las oficinas y ante la negativa de la dirección de Correos a cubrir con sustitutos los periodos de descanso estival de los repartidores.