Sin apenas cambios. Justo una semana después de que la alcaldesa de Vilagarcía visitase las inmediaciones de la avenida de A Mariña para anunciar la ejecución de pasos de peatones elevados, apenas han avanzado las obras que, previsiblemente, mejorarán la seguridad vial en este céntrico vial. A día de hoy, la empresa encargada de la realización de los trabajos sólo ha picado los márgenes del paso de cebra ubicada justo enfrente de la calle Castor Sánchez. Además, se han trasladado hasta el lugar las tuberías con las que, a priori, se pretenden canalizar las pluviales para evitar inundaciones en caso de fuertes lluvias.

Y nada más. Justo el día del comienzo de las obras, la alcaldesa estimaba que los dos pasos elevados que se ejecutarán en una primera fase en A Mariña estarían terminados a finales de esta semana, aunque el ritmo de los trabajos evidencia que estos se prolongarán un poco más.

Las vallas de protección de obras llevan colocadas en el citado paso de cebra una semana y los obreros sólo trabajaron de modo continuado durante la mañana de inicio de las obras. Ahora, queda por elevar por completo ese paso y empezar a ejecutar el mismo proceso en el que se encuentra justo delante del edificio de la Comandancia de la Marina.

Con estos trabajos el gobierno local espera frenar la oleada de atropellos que se sucedieron desde el mes de mayo en el casco urbano. Además, esta campaña de contención de la siniestralidad viaria también incluye una actuación importante en la recta de Rubiáns (avenida de Pontevedra) que consistirán en la colocación de más pasos de peatones, así como de bandas rugosas para obligar a los conductores a reducir la velocidad. Para ello habrá que esperar aún por el permiso de Fomento.