Mayor vigilancia. Después de la oleada de atropellos en el término municipal vilagarciano, los partidos de la oposición coinciden en que una de las medidas que debe adoptarse de modo urgente es la de un mayor control por parte de los agentes de la Policía Local en zonas calificadas como "conflictivas" en temas de siniestralidad vial. Según esto, los agentes deberían vigilar más de cerca los pasos de peatones de calles con un elevado tráfico de vehículos e incluso aquellos enclaves en los que la gente cruza por donde no hay paso de cebra.

Tanto el Partido Popular como Izquierda Unida señalan que en cuestiones de seguridad "existen prioridades"_y que, por lo tanto, los agentes deberían centrarse más "en vigilar a los ciudadanos y no tanto en poner multas en Zona_Azul". El PP_cree que las deficiencias en actuación por parte de los municipales "no es culpa de los funcionarios, sino de la gestión de la alcaldesa" y reseña que sería necesaria "una mayor coordinación con la Policía Nacional para controlar una situación que ya se nos está escapando de las manos".

Plan de tráfico

Después del último atropello, que eleva a 35 los registrados este año, el portavoz popular insiste en que es necesario convocar "de urgencia" una reunión entre todos los grupos políticos y distintos colectivos de la ciudad para "tomar conciencia de lo que está sucediendo y ejecutar medidas de actuación inmediatas". Fole cree que el problema de los accidentes en Vilagarcía no viene de ahora, sino que "lo sufrimos desde hace más de diez años sin que ningún gobierno local haya sido capaz de solucionarlo ni de ejecutar acciones que, al menos, los redujesen".

De hecho, tanto el PP como IU creen que la solución a los múltiples atropellos no pasa sólo por una mayor vigilancia, sino también por la elaboración de un plan de tráfico (paralelo al anunciado Plan de Mobilidade) que incluiría la ejecución de pasos elevados no sólo en la avenida de A Mariña y en A Laxe (donde ya están previstos), sino en otros enclaves como la calle Valle Inclán, Rosalía de Castro o Conde Vallellano.

El portavoz de IU, Juan Fajardo, insiste por su parte en que las medidas acordadas la semana pasada por la alcaldesa para mejorar la seguridad en la controvertida recta de Rubiáns "son insuficientes". El izquierdista cree que la colocación de los pasos elevados "no son garantía" para la total tranquilidad de los peatones e incide en que, además de la citada actuación, lo ideal sería dotar a la calzada de unas aceras amplias y cómodas además de mantener un control sobre el funcionamiento coordinado de los semáforos.

Por el momento, la Policía Local se centra estos días en un operativo especial de control de velocidad en distintos puntos de la ciudad. Ayudados de los radares cedidos por la Dirección General de Tráfico han puesto especial interés en las denominadas zonas "conflictivas", pero incluso esta acción concreta ha provocado la reacción crítica de la oposición que considera que, aún así, "es insuficiente".