El Liceo Casino optará por la subcontrata de parte de las instalaciones previstas en su proyecto de sede para las dársenas 2 y 3 del puerto para financiar una idea cuyo presupuesto asciende a 13 millones de euros. Pendiente de una adjudicación oficial, el presidente de la entidad, Álvaro Paz, señaló que el proyecto es "muy ambicioso" y que, del presupuesto total, unos 5 millones corresponderían a inversiones reales por parte del Liceo. Así las cosas, la entidad vilagarciana se vería obligada a optar por el régimen de concesión de algunos de los servicios que aparecen especificados en su proyecto como son la piscina o la pista de pádel entre otros, para poder hacer frente a los gastos que su idea acarrea. Esto implicaría la inclusión de otras empresas foráneas en la explotación de los antedichos servicios, aunque siempre bajo gestión directa de la principal concesionaria que, en este caso, sería el Liceo.

Otros ingresos

De todas formas, el Liceo Casino dispone de los casi 1,8 millones de euros de la venta de la finca de Ravella y de la partida que el Ministerio de Fomento debe aportarles por la expropiación de la finca de A Boulla y de la que todavía no tienen comunicación directa. Todo ello, unido al régimen de concesiones previsto.

La inversión permitiría que, en unos dos años, el Liceo contase con una nueva sede, un plazo que se establece el presidente de la entidad como fecha límite para responder a una necesidad de espacio.

Álvaro Paz señala además que, en caso de contar con las dos dársenas antedichas, el Liceo renunciaría a la concesión que posee del espacio que ahora ocupa el Club de Mar y que pasaría nuevamente al Puerto. Esta es, según el presidente del Liceo, una mejora sustancial que diferencia a la propuesta de su colectivo frente a las que puedan presentar las otras tres empresas en liza.

Además, el Liceo es la única empresa netamente vilagarciana que opta a concurso, lo que también podría ser tenido en cuenta por parte de la comisión de evaluación.

De todas formas, todos estos balances económicos no son más que conjeturas. Los socios del Liceo deberán esperar al menos hasta el Consejo de Administración del mes de septiembre para conocer la resolución oficial. De ser favorable, la entidad vilagarciana contaría con una concesión de treinta años en un espacio muy próximo al Centro de Tecnificación de Vela.

Asimismo, en el aire quedaría el hecho de que la entidad decidiese o no prescindir del inmueble que actualmente utiliza en la calle Castelao que, de todas formas, podría ser usado para trámites puramente administrativos. Todo ello sería decidido, no obstante, en caso de que la adjudicación se hiciese efectiva.