La falta de suministros obliga a suspender pruebas diagnósticas en el área sanitaria
La CIG denuncia que los problemas comenzaron hace diez días y ya se han aplazado TAC
CIG-Saúde ha denunciado que la falta de material está provocando la suspensión de pruebas diagnósticas como el TAC en el área sanitaria de Pontevedra y O Salnés. Además, el hospital de Montecelo se encuentra sin equipo de resonancia magnética desde noviembre.
La central sindical añade que “el servicio de radiología de los hospitales Provincial y Montecelo de Pontevedra y del distrito de Salnés tuvo que suspender las realización de estas pruebas por falta de la sustancia que se utiliza como contraste en esta prueba diagnóstica”.
Según explican desde el CIG-Saúde de Pontevedra, la escasez de contraste se produce desde hace al menos 10 días, "pero no ha sido hasta este jueves que se han empezado a suspender los TAC". La CIG señala que "en los dos primeros centros había suficiente para unas siete personas, mientras que en el Salnés sólo para dos".
Por ello, los hospitales decidieron realizar solo las pruebas más urgentes y reservaron 2-3 dosis de contraste en caso de emergencia, dejando hasta 15 tomografías computarizadas solo en el Provincial. “Desde los centros se pusieron en contacto con la Gerencia del área sanitaria, pero aún no les han dado respuesta; Además, se comunicaron con los hospitales de Vigo, que al parecer sí tienen el contraste para cederles".
Ante esto, desde la central sindical se preguntan "cómo es posible que los centros de Vigo dispongan de dosis extra mientras en el caso de Pontevedres hay escasez, teniendo en cuenta que las compras se realizan de forma centralizada. Es cierto que hay problemas de suministro por parte de las farmacéuticas, sobre todo con las que más trabaja el Sergas, pero alguien debería poner sobre la mesa una solución urgente”, añade el sindicato.
Por otro lado, el CIG-Saúde también lamenta "lo que está sucediendo con el nuevo equipo de resonancia magnética lanzado recientemente en el hospital de Montecelo". Asegura que "cambiaron el aparato y tenía que empezar a funcionar a mediados de enero, pero sufrió una fuga de helio que está siendo investigada por la policía para ver si fue sabotaje o mala manipulación, según sostiene la empresa; lo cierto es que desde noviembre no tenemos equipos de resonancia".
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