Las escuelas municipales de música de los concellos de Sanxenxo y Caldas de Reis dieron comienzo ayer el nuevo curso académico con un número de matriculaciones muy elevado, puesto que sendos centros rozan las 200 inscripciones.

En concreto, la escuela de Sanxenxo bate récord, puesto que un total de 195 alumnos se matricularon este año, 187 niños y 8 adultos, el mayor número de su historia según destacaron fuentes municipales. Asimismo, 32 alumnos permanecen en lista de espera y a lo largo de este semana, desde el Concello de Sanxenxo se tratará de dar respuesta en función de la disponibilidad de plazas.

El curso daba comienzo ayer con aforos limitados y 16 profesores para impartir las diferentes especialidades y materias, entre las que se encuentran oboe, flauta, clarinete, saxofón, fagot, trompa, trombón, tuba, violonchelo, percusión, guitarra, piano, lenguaje musical, educación musical, iniciación musical, música y movimiento y contrabajo.

Desde el Concello de Sanxenxo destacaron que este año “ha hecho un importante esfuerzo económico para ampliar el material instrumental con dos contrabajos, un violonchelo, dos oboes, una mini trompa y diverso material de percusión”.

En cuanto al protocolo COVID, este se mantendrá con diez alumnos por aula y tan solo se reducirá la distancia a 1,20 metros de distancia. Asimismo, este año se retomarán las clases de coro y de conjunto instrumental. En este sentido, Benjamín Dorado apuntó que “o protocolo funcionou moi ben ata agora e vámolo manter. Non tivemos nin un só caso COVID”.

Nueva imagen en Caldas

Otra de las escuelas de música que inauguraron ayer el curso fue la de Caldas con un total de 188 plazas cubiertas, de los cuales 54 fueron alumnos de nueva matrícula. Del total, prácticamente la mayoría residen en la propia villa termal, pero también hay alumnos de otros municipios de la comarca de Caldas de Reis.

Coincidiendo con el inicio del curso académico, el Concello aprovechó también para presentar la nueva imagen de la Escuela. Se trata de un imagotipo con los colores de las ventanas del edificio que alberga la escuela.