Pontevedra es la segunda ciudad de las siete gallegas con menor porcentaje de población diana vacunada, con el 77,4% de su censo ya inmunizado, solo por delante de Vigo (75,6%). En Santiago se llega al 81% y al 80,6 en Ferrol, mientras que Lugo tiene al 80,3% de la población ya vacunada y Ourense está en el 80%. El índice de A Coruña es del 78%. Además, A Lama es el municipio gallego con menos población inmunizada en toda Galicia, con menos de 67%, que contrasta con el 86,5 de Agolada.
Por su parte, son once los municipios de la comarca que se encuentran fuera del riesgo extremo de COVID, un nivel que se alcanza a partir de una incidencia acumulada a 14 días de 250 casos por cada cien mil habitantes. Por debajo de esa barrera están Pontevedra, Marín, Poio, Vilaboa, Barro, Caldas, Cuntis, Portas, Moraña, Campo Lameiro y Ponte Caldelas. Solo Cerdedo-Cotobade, A Lama y Sanxenxo, aunque este último está cerca de abandonar ese nivel ya que su incidencia baja de 300.
Ese descenso general de casos se detecta en el toda el área sanitaria Pontevedra-Salnés, que este domingo presentaba una cifra total de 634 casos activos, 55 menos que la jornada anterior. El número de hospitalizados se mantiene estable, con 13 ingresados en planta, uno menos que el sábado, y cinco en la Unidad de Cuidados Intensivos de Montecelo, los mismos que 24 horas antes, si bien el Sergas notificó a última hora el fallecimiento de una mujer de 90 años en Montecelo que procedía de la residencia de mayores Soremay. Es la vigésima víctima mortal en el área en el último mes.
La situación por municipios también es favorable. Además de que solo tres continúan en riesgo extremo, hay cuatro que no registran casos nuevos desde hace una semana. Se trata de Barro, Caldas, Portas y Campo Lameiro, a los que se suman Valga, Catoira y Meaño en el resto del área sanitaria. La ciudad de Pontevedra contaba este domingo con 189 enfermos activos, tras un recorte de 17 en apenas una jornada.
