El pleno de Ponte Caldelas aprobó el presupuesto municipal con los votos del grupo socialista. El PP votó en contra por considerarlos “inadecuados” para atender las demandas de la ciudadanía en materia de pandemia y por contemplar un aumento histórico en el gasto político situándolo en 228.469 euros anuales (unos 900.000 euros para toda la legislatura) y la contratación con dedicación parcial para otro nuevo edil socialistas “elevando la nómina del equipo de gobierno a niveles estratosféricos siendo el más costoso del entorno”.
El capítulo presupuestario que más sube es el destinado a cargos políticos que duplica la asignación que tenía en la época del tripartito y que aumenta en unos 100.000 euros, “más del doble de la partida aumentada en Servicios Sociales para intentar paliar el déficit asistencial en este departamento”, resalta el portavoz popular, Antón Xil.
Subraya este concejal que “desde que Andrés Díaz llegó a la Alcaldía no dejó de engordar el capítulo de gastos del equipo de gobierno, sobre todo llega a subir de manera exponencial a partir de su mayoría absoluta pasando a duplicar, prácticamente, este capítulo, al igual que su salario que vuelve a sufrir en estos presupuestos una nueva subida económica en contradicción con la decisión tomada por la Xunta para sus altos cargos, el propio Gobierno de España y mismo, tras rectificar, la Diputación de Pontevedra”.
Al PP le parecen “astronómicos” los salarios y el coste del equipo de gobierno y consideran un auténtico “ despilfarro” la cantidad que se dedica al pago de los ediles socialistas del grupo de Andrés Díaz, sobre todo en estos momentos de especial sensibilidad y donde los representantes públicos deben dar ejemplo desde el punto de vista ético y estético.
El portavoz del PPdeG, Antón Xil, le afeó este comportamiento al alcalde y le recordó las críticas que hacía cuando estaba en la oposición a su antecesor que solo tenía una secretaria que cobraba casi la mitad que cualquiera de los concejales socialistas que ahora tiene contratados. También reivindicó la figura de Paco Regueira, ex teniente de alcalde.
