La Jefatura Territorial de Educación tiene la intención de dar cumplimiento lo antes posible a la sentencia del juzgado de lo Contencioso que obliga a retomar las clases de primero de Primaria en la escuela de Verducido. Como muy tarde, el fallo estará ejecutado antes de los diez días de plazo máximo que establece el tribunal.

Ayer comenzaron a darse los primeros pasos para dar cumplimiento a la resolución judicial. La intención de la administración es conocer, en primer lugar, si los padres y madres de las cuatro niñas que se habían matriculado en el centro y que han iniciado el curso en otros colegios siguen apostando por escolarizar a sus hijos en Verducido. Distintas fuentes consultadas explicaron que con que tan solo uno de los alumnos manifestase su intención de escolarizarse en Verducido, la Xunta ejecutará la sentencia y volverá a abrir el centro. Al mismo tiempo, también se están dando los pasos para contratar al profesor que darán clase en el centro.

Distintos colectivos y entidades felicitaron ayer a la comunidad escolar de Verducido por el éxito alcanzando en los tribunales. Entre ellos estuvo el BNG, quien además anunció que llevará el caso al Parlamento de Galicia para pedir que se restablezca la legalidad en el plazo más breve posible. El diputado del BNG, Luis Bará, va más allá y pide que el Parlamento apoye el “proyecto educativo integrador e innovador” de esta escuela rural y que “por parte de la Xunta se pida disculpas a las familias y a la comunidad educativa” por esta decisión que luego enmendó el juzgado de lo Contencioso.

No obstante, el fallo solo garantiza la escolarización durante este curso, dado que el juzgado no se entromete en las competencias de Educación para cerrar o abrir nuevos centros educativos, sino que “dé cumplimiento previo de una serie de formalidades procedimentales mínimas, esenciales para garantizar su acierto y para no causar indefensión a los afectados”. Es por ello que el BNG pedirá garantizar la continuidad de este centro educativo.

Tanto el BNG como la CIG-Ensino pidieron ayer que se depuren responsabilidades. El BNG cree que esta actuación “merecería el cese o dimisión del jefe territorial de la Consellería de Educación”. La CIG recuerda que justo en esta situación de pandemia es cuando estas escuelas rurales “deberían tomar un mayor protagonismo”.