Estuvo a punto de convertirse en la primera área sanitaria libre de Covid-19 en la comunidad gallega y, sin embargo, los últimos contagios contabilizados llevan a Pontevedra e O Salnés a situarse al nivel del área de Santiago de Compostela, por encima de Ourense y Ferrol.
Tras varias semanas consecutivas registrando cifras inferiores a la decena de casos, incluso con días en los que apenas se cuantificaron un par de ellos, el área de Pontevedra e O Salnés suma en la actualidad 11 casos activos de Covid-19, retrocediendo así a las cifras registradas a principios del mes de junio. Este fue el balance ofrecido ayer por el informe diario que remite la Consellería de Sanidade y en el que se revela que en las últimas 24 horas se han sumado cuatro nuevos positivos.
La tendencia al alza en la demarcación sanitaria va pareja a la evolución epidemiológica en Galicia, donde ayer se sumaban 17 nuevos infectados debido a varios brotes que afectan a Porriño, A Coruña y Xove. Parte del repunte radica en los "casos importados", personas que visitan nuestra comunidad y transmiten el virus. Así, una trabajadora de una residencia de Xove y su familia dieron positivo tras una visita procedente de Cataluña, o los jugadores del Fuenlabrada aislados en un hotel de A Coruña.
En el caso concreto del área de Pontevedra e O Salnés, a preguntas de este periódico, la Consellería de Sanidade no ha respondido si este incremento de cuatro positivos en las últimas horas se debe a casos importados o si se trata de un rebrote del virus en la zona.
Cabe recordar que, en la última semana, el departamento autonómico se vio obligado a activar el protocolo anti-Covid en el área sanitaria hasta en tres ocasiones: en primer lugar, por el positivo de un facultativo del centro de salud de Baltar, en Sanxenxo, también por la llegada de un grupo de peregrinos con síntomas a un albergue de Vilanova de Arousa, y la más reciente, a principios de esta semana tras la detección de un positivo en el entorno familiar de un empleado de la frutería El Vergel, situada en el centro de la ciudad de Pontevedra.
La evolución al alza de la pandemia equipara así al área con otras que a lo largo de la emergencia sanitaria se vieron mucho más afectadas por el virus, como Santiago y Ourense. Así, Pontevedra e O Salnés ha pasado de ser una de las demarcaciones con menos casos y fallecidos a igualar e incluso superar a estas en cuanto a número de contagios en la actualidad. En las últimas semana incluso parecía que podría convertirse en la primera demarcación libre de coronavirus, con cero pacientes, pero finalmente fue Ferrol quien lo logró.
Analizando los datos epidemiológicos del mes de julio, estos muestran el leve pero incesante goteo de positivos en la zona. El Sergas descartaba hablar de brotes en los casos detectados en marineros de Marín y también en el caso del positivo que llevó a la frutería El Vergel a bajar la persiana por precaución.
Pese al aumento de positivos, que hace al área retroceder a niveles de principios de mes, los hospitales continúan vacíos: sin ingresos en la UCI ni en planta. En este sentido, los once diagnosticados guardan cuarentena en sus casas bajo supervisión médica.
En las últimas horas, los profesionales del Complexo Hospitalario Universitario de Pontevedra y del hospital comarcal de O Salnés han prescrito dos nuevas altas médicas, lo que eleva a 906 las personas que se han recuperado de la enfermedad por completo desde el inicio de la pandemia. La cifra de fallecidos se mantiene en 16 víctimas mortales.
A nivel autonómico, en la actualidad permanecen activos 180 casos y se han curado un total de 11.197 pacientes.
