La falta de seguridad vial en la PO-308 a su paso por Poio ha vuelto a indignar a los vecinos después de que el pasado miércoles un niño y una mujer resultasen atropellados en el vial en diferentes sucesos, el primero en Chancelas y el segundo en la rotonda junto al pazo de Besada. Por eso han convocado una manifestación para demandar a la Xunta más medidas de protección para los usuarios del vial especialmente más vulnerables, los peatones y ciclistas.

La marcha convocada por la familia y vecinos más próximos al niño atropellado en Chancelas será el próximo viernes día 26. Será a partir de las 21.00 horas y realizarán un trayecto por la PO-308 saliendo desde las proximidades de donde se produjo el accidente hasta la playa Ouriceira, donde realizarán la lectura de un comunicado reclamando más medidas de seguridad peatonal.

La polémica sobre la inseguridad en la PO-308 vuelve al foco poco más de un mes después de que otra niña fuese víctima de otro atropello en la avenida de A Barca. Tras un cruce de reproches entre la Xunta y el Concello, el gobierno local optó por aumentar la visibilidad en los semáforos y pasos de cebra en la carretera de titularidad autonómica, mientras que desde la Consellería de Infraestruturas eliminaba las plazas de aparcamiento próximas a los cruces de peatones para evitar que los vehículos estacionados dificultasen la visión de los viandantes.

La propia conselleira, Ethel Vázquez, recordaba la apuesta de la Xunta por mejorar la seguridad vial en el vial autonómico en una visita realizada la pasada semana. Allí anunció que las obras en los cruces y de las aceras entre Covelo y Raxó estarán completas en noviembre, mientras que el otro gran proyecto en marcha, el de las sendas entre Fontoira y Samieira, pasando por Combarro, se licitarán tras el verano con el objetivo de que "sean una realidad en 2020".