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Luis Rojas-Marcos, ayer, en la sede del Centro de Formación e Recursos de Pontevedra. // Gustavo Santos

Luis Rojas-Marcos: "En contra de los que dicen que vamos a peor, la realidad es que vivimos más y mejor"

"Aquí habláis bastante y creo que es parte de la razón por la que vivís más... Hablar es uno de los factores que nos hace longevos"

El ciclo de conferencias Diálogos de Educación que celebra el Centro de Formación e Recursos de Pontevedra contó ayer con el prestigioso psiquiatra Luis Rojas-Marcos, que incidió en el papel terapéutico de hablar con los demás? Y de hablarnos (cariñosamente) a nosotros mismos. Para empezar, recuerda que "los optimistas son los que generalmente aciertan, porque evalúan tanto la parte negativa como la positiva, mientras que los pesimistas solo esta última, así que los optimistas tienen más posibilidades de acertar".

-¿La palabra cura?

-Así es.

-En este país hablamos bastante.

-Aquí habláis bastante, sí, y creo que es parte de la razón por la que vivís más. La esperanza de vida de los españoles es muy alta y la de la mujer española es la tercera del mundo, de media más de 86 años, y creo que una razón es esa. Lo digo basándome en estudios que se han hecho de lo que llaman la personalidad de la longevidad, es decir cuál es el tipo de persona que vive más, y hablar es uno de los factores que nos hace longevos, y no digo solamente hablar con otros sino hablarnos a nosotros en voz alta o baja.

-No es muy popular hablar solo, habrá quien lo tache de loco

-Lo comprendo, tiene una carga de estigma pero la realidad es que si lo pensamos hablamos más tiempo con nosotros mismos que con los demás. Lo que sucede es que no nos educan de pequeños del mismo modo que nos dicen pide las cosas por favor o da las gracias. No nos dicen y cuando te hables a ti mismo, trátate bien, ayúdate a decidir, date ánimos, protege tu autoestima, no nos enseñan eso, no.

-¿Las redes sociales ayudan o nos aíslan aún más?

-Escribir no es hablar, y comunicarte con la tecnología no es hablar. El cerebro tienes dos partes, una se encarga de transformar sentimientos o ideas en palabras (que si uno lo piensa verdaderamente es increíble, que podamos transformar algo que sentimos en una palabra, yo estoy triste). Ese es el primer paso, el segundo es pronunciar la palabra tristeza, en voz alta o baja me digo Luis estás triste, o hoy estás nervioso, en fin, eso es hablar. La tecnología es positiva en el sentido que nos ayuda a conectar con personas que están muy lejos y a mantener un cierto conocimiento de lo que está pasando, pero si esa tecnología interfiere con otras actividades, se convierte en una adicción, pues pasará como con la televisión, que al principio era una euforia y después había 2.000 artículos que la culpaban de todo, la violencia, las adicciones? Más que la tecnología es el uso que hacemos, y hay que estar vigilantes, si uno percibe que duerme menos o que interfiere con las actividades diarias

-¿Sigue siendo el crecimiento emocional nuestra principal asignatura pendiente?

-Efectivamente, creo que también hemos tardado en entender estos temas, por eso en este libro ( Somos lo que hablamos. El poder terapéutico de hablar y hablarnos, editado por Grijalbo) al principio hablo de la medicina de la calidad de vida, que es medicina que no trata de curar enfermedades sino de mejorar la calidad de vida de las personas. La primera medicina de la calidad de vida fue en los años 60 la píldora, que es una medicina, estrógenos, progesterona, no cura ninguna enfermedad pero ayuda a millones de mulleres a decidir cuando o si quieren tener hijos.

-¿Qué nos ayuda a superar adversidades?

-Ahora ya lo estudiamos también y sabemos, por ejemplo, que las personas que localizan el control dentro de ellas mismas tienen más posibilidades de superar una adversidad o de sobrevivir a un accidente que aquellas que dicen, bueno, es cuestión de suerte, que sea lo que dios quiera? Son personas que no actúan.

-Ha abordado desde distintas ópticas el tema de la felicidad ¿está realmente en nuestras manos ser más felices?

-No todo está bajo nuestro control, obviamente, pero hoy ya sabemos, porque se han estudiado científicamente, que hay una serie de factores que nos ayudan. Cuando estudiamos la felicidad, es curioso, no le llamamos felicidad, le llamamos satisfacción con la vida en general; incluso la definición de salud de la OMS indica que es el estado completo de bienestar físico, psicológico y social. En gran medida depende de nosotros, por ejemplo sabemos que el ejercicio regular ayuda al corazón, ayuda a las personas con tendencia a la diabetes, en muchos sentidos al estado físico de la persona. También sabemos lo que hablábamos antes, la persona que localiza el centro de control dentro de ella misma va a tener más posibilidades de superar algo. Es como si me dicen, mira, Luis, eres diabético, tienes que tomar una medicina, y si pienso que puedo hacer algo por tratarme, participar en el tratamiento, eso sabemos que me va a ayudar. Sabemos también, hay que decirlo, que la persona que diversifica sus fuentes de felicidad y las compartimenta un poco, tendrá más posibilidades de ser feliz.

-Señala a esta diversificación en escenarios como la ruptura de pareja.

- Sabemos que las personas que se divorcian, que es un paso muy difícil y muy duro, si están contentas en su trabajo superan el divorcio mejor que si no tienen otras parcelas de satisfacción. Entonces si todas esas cosas de las que hemos hablado nos las enseñan de pequeños vamos a orientar nuestra vida a ejercitar el control sobre uno mismo, a diversificar nuestra vida, a hacer ejercicio etc, en fin a aplicar todos esos conocimientos que tenemos hoy.

-¿Hago bien si soy optimista?

-Sí, para empezar porque acierta más, como comentamos antes, pero también porque lo intentan más veces y así se cumplen esas previsiones optimistas. Y también acierta porque en contra de los que dicen que vamos a peor, que ahora estamos mucho peor la realidad es que vivimos más y mejor, algo estamos haciendo bien, curamos enfermedades y hace solo unos años a una mujer para que le sobreviviese un único hijo tenía que tener varios. Mejoramos, vamos a mejor sin duda.

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