El PP de Ponte Caldelas asegura que el alcalde, Andrés Díaz fuerza a sus compañeros del gobierno tripartito a avalar su política de la "gestión a pufo" mediante la cual acaba de reconocer extrajudicialmente en el pleno celebrado ayer que dejó sin pagar 256.647 euros a proveedores locales durante el año pasado. "Este modo de gestionar tan desastroso cuenta con el informe negativo de Intervención en el que se refleja que está utilizando una manera de proceder extraordinario de manera habitual por el descontrol existente y así muchas de las facturas cuentan con insuficiencia de crédito para los gastos consignados. De hecho, en el 2016, Díaz dejó sin pagar 95.000 euros, otros 170.000 en el 2017 y ahora, 256.647 euros", afirman los populares. Por su parte, desde el gobierno local reconoce que el importe es un poco más elevado del habitual debido a la inclusión de las indemnizaciones derivadas de las sentencias judiciales sobre el Centro de Información a la Mujer (CIM), y "sentencias derivadas de la nefasta gestión realizada por el anterior equipo de gobierno del PP, que mantuvo a dos trabajadoras autónomas entre los años 2006 y 2015 con contratos adjudicados a dedo, pagándoles salarios de vacaciones, bajas laborales y abonándoles las facturas sin contrato alguno en varias ocasiones".
