La plataforma vecinal Salvemos a Fracha insiste en los efectos negativos que tiene todo el trazado de la autovía A-57 en el rural de Pontevedra y de todos los municipios por los que pasa y reitera su petición al Gobierno para que paralice esta obra "completamente innecesaria" que supone uno "malgasto de fondos públicos."

El colectivo integrado por vecinos de la parroquia de Marcón contrarios al proyecto muestra su solidaridad con los vecinos de Xeve y Bora y recuerda el "impacto negativo" que la autovía tendrá en espacios "de gran valor ambiental, social y económico de estas parroquias".

Insisten en que los daños son "presaxiables" tras comprobar el impacto en A Fracha, una sierra en la que se construye desde hace tres años el primer tramo entre Vilaboa y A Ermida. "El paraje natural, lugar de esparcimiento habitual de miles de personas, está sufriendo excavaciones, desmontes y todo tipo de agresiones que, aunque ahora se paralizaran las obras, serían irreparables."

Salvemos a Fracha mantiene su petición de que debe ponerse fin "a este despropósito", pues considera que "aún estamos a tiempo de salvar otros puntos del rural".

Apuestan, por lo tanto, por parar un proyecto que, como la plataforma sostiene desde 2014, supone "duplicar infraestructuras cuando existe una alternativa lógica a su construcción: la liberación de la autopista AP-9",