El rosetón de San Francisco transformado en pendientes, colgantes y pulseras. Es la obra que inaugura la colección "Joyas con Historia" de Suárez, firma presente en Pontevedra desde hace un siglo y que pone en marcha esta iniciativa que rinde homenaje al patrimonio monumental de la ciudad.

Los primos Monchi y Valentín Suárez, al frente de la joyería, encabezaron ayer la presentación de la colección en un acto que tuvo lugar en el claustro de San Francisco, el convento en cuya fachada "emerge como un ojo gigante que todo lo ve, un hermoso rosetón de 5 metros de diámetro" que sirve de arranque para la colección, como se recuerda en la paquetería en la que se presenta cada pieza.

La idea de la colección surgió, explica Monchi Suárez, porque "Pontevedra es una ciudad supermonumental y pensamos que en joyas los monumentos podrían quedar muy bien? Ya empezamos a hacer cosas a partir de la Virgen Peregrina hace tiempo, pero surgió esta idea?".

El rosetón, desmantelado en el XVIII y originalmente de unos 2 metros de diámetro con 8 pétalos, fue posteriormente reconstruido a partir de la armazonería localizada en los alrededores del convento y ampliado a 12 pétalos, con el tamaño con el que preside desde aproximadamente el año 1930 la fachada del convento.

Se trata de las primeras "Joyas con Historia" que los responsables de la iniciativa confían desarrollar en adelante. "Hay más previstas", señaló Monchi Suárez, que prefiere no avanzar sobre la inspiración de las nuevas piezas, en su totalidad dedicadas al patrimonio pontevedrés.

Cada pieza de la colección se entrega en una caja de regalo que incluye una pequeña historia del rosetón firmada por el médico e investigador Gonzalo González Lorenzo, que excusó su asistencia a la presentación por motivos de salud.

Las joyas se realizan en plata, el material de base, "y después llevan baños de rodio, de rutenio, chapados en cobre y en oro amarillo", detalla la misma fuente, que añade que "las piezas sirven para cualquier edad, tenemos más pequeñas para jovencitas y otras más grandes pensando en gente más mayor".

En todos los tamaños se respeta el diseño original del rosetón y las joyas (a la venta entre 30 y aproximadamente 80 euros) permiten lucir en plata el patrimonio en piedra de la ciudad.