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Álvaro Lorenzo el pasado julio en un tentadero de becerras bravas en la plaza de Pontevedra. // R. Vázquez

Álvaro Lorenzo: "Se consiguen faenas mágicas que son inolvidables, pero la perfección no existe"

"Me hace mucha ilusión mi debut en Pontevedra", señala el joven diestro, que hoy compartirá cartel con Diego Ventura y López Simón

"Me hace mucha ilusión mi debut en Pontevedra, tengo muchas ganas de estar en esa plaza toreando", explica Álvaro Lorenzo, que esta tarde compartirá cartel con Diego Ventura y López Simón en la segunda de feria, "en una plaza tan bonita y con una afición tan respetuosa y cariñosa".

-¿Le han dado sus compañeros referencias de la afición?

-Sí, tengo referencias, mis apoderados son los empresarios de la plaza, me han contado mucho, y además tengo mucha y buena relación con Daniel Luque, que ha toreado en Pontevedra muchos años y ha sido triunfador casi todos los años que ha estado aquí y me ha contado la afición tan buena que hay, tan cariñosa y que van a los toros con ganas de divertirse y de disfrutar, así que tanto por lo que me han dicho como por lo que he visto en vídeos estoy deseando torear en Pontevedra.

-¿Cómo surgió su vocación taurina?

-Fue desde siempre, desde pequeño, en mi casa mis abuelos y mis padres siempre han visto toros, yo desde pequeño los veía en la televisión y desde entonces dije que quería ser torero.

-¿Recuerda cuándo decidió ser matador?

-Ha sido poco a poco, fue una decisión que maduré día a día, porque al principio empiezas probando como una afición y no piensas que va a ser tu futuro ni a lo que vas a dedicar tu vida, pero es una afición que tienes, que te gusta y tienes que querer ser torero, sin ser consciente de lo difícil que es y poco a poco te van saliendo las cosas, vas toreando y un día te das cuenta de que quieres dedicar tu vida al toro.

-¿Cuándo toreó por primera vez?

-Ya de pequeño toreaba, cuando tenía 6 añitos toreaba becerras recién nacidas, lo que sucede es que una de las veces cogí miedo y me negué a salir, mi padre se enfadó conmigo (sonríe) y ahí lo dejé un poco. Luego volví a la Escuela Taurina de Toledo con 13 años y ahí fue donde de nuevo volví a torear.

-¿Cómo es su toreo?

-No sabría decirle, se dice que se torea como se es pero no sabría decir cómo toreo.

-Hablan de sus hechuras clásicas ¿se siente identificado con esta percepción?

-Sí, es un poco lo que busco, lo que sucede es que no siempre sale, hay veces en las que uno no puede hacer lo que realmente lleva dentro, pero eso es lo que busco, el toreo clásico, el toreo puro de toda la vida y, sobre todo, torear como lo siento y como de pequeño toreaba, que es el toreo más profundo de cada uno, el de cuando eres niño, el de cuando no tienes idea de la técnica ni del oficio y es lo más puro, eso es lo que busco hacer.

-¿A qué toreros admira?

-A muchísimos, a muchos toreros, quizás los toreros que más me gustan o que más veo de ellos ahora mismo son el maestro Manzanares padre que en paz descanse y el maestro José Tomás, son ahora mismo los dos toreros que más me gusta ver. Y luego me gustan todos en verdad, me gusta aprender de todos, me gusta Morante, Perera, Talavante, Castella, Manzanares, todos, incluso toreros jóvenes como López Simón, Roca Rey, me gusta fijarme en ellos, también en chavales que están empezando y aprendiendo a torear, porque de todo el mundo aprendes cosas.

-¿Cómo es su entrenamiento?

-No todos los días hago lo mismo para que no se convierta en algo monótono y rutinario porque el toreo no es eso. Normalmente lo que suelo hacer tras levantarme es hacer un poco de ejercicio, correr o caminar, y luego desayuno y me voy a torear de salón, y por la tarde toreo de salón también, toreo animales, siempre quiero estar metido en mi profesión y con los sentidos puestos en mi preparación, sin despistarme con nada.

-¿Dedica muchas horas a perfeccionar su preparación?

-Sí, prácticamente le diría que casi todas las horas del día, ahora estoy viviendo en el campo en la finca de mis apoderados para prepararme y mentalizarme y allí cuando estoy entrenando físicamente estoy pensando en el toro, mentalizándome, viendo animales, viendo vídeos de otros compañeros y todo eso es un entrenamiento, es vivir 24 horas para el toro, es lo que yo hago, además de mis entrenamientos vivir el toreo.

-¿Se imagina la faena perfecta?

-Sí pero la faena soñada nunca se consigue creo yo, se consiguen faenas mágicas que son inolvidables, pero creo que la perfección no existe y si existiese sería todo muy aburrido, creo que esa faena perfecta nunca se va a conseguir, puedes lograr una rotunda pero perfecta? Creo que no hay nada.

-¿Tiene algún rito o manía antes de ir a la plaza?

-No, la verdad es que no tengo ninguna manía fuera de lo normal, tampoco me quiero comer la cabeza con tonterías de esas porque al final son eso (sonríe), tonterías que no te llevan a nada.

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