La lucha contra el fraude y los errores en el padrón del IBI es la apuesta del Concello de Pontevedra para este año y por ello urge la formalización del convenio con el Catastro (que la administración local ya ha firmado) para poder iniciar la inspección de los objetos tributarios actuales e iniciar el peinado para la detección de los no declarados, en definitiva para actualizar el censo de propiedades susceptibles de tributar el IBI.

De acuerdo con las previsiones que maneja el concejal de Facenda, Raimundo González Carballo, el Concello confía en sacar a la luz alrededor de 2.000 objetos tributarios sin declarar cuyos recibos aportarán a las arcas locales un mínimo de medio millón de euros.

"Es una cuestión de justicia, equidad e igualdad de trato a los ciudadanos" recalcaba ayer el edil González Carballo que considera que debe ser la lucha contra el fraude la que debe marcar las líneas de la política fiscal y no subidas generalizadas como la del 10% del IBI que impone el Gobierno que lo que hacen es penalizar a los ciudadanos que cumplen con sus obligaciones, pues son sus recibos los que se verán incrementados.

Susceptibles de tributar

El ultimo padrón del IBI de Pontevedra recoge 65.000 objetos tributarios que no inmuebles o viviendas, aclara Raimundo González, que enumera entre estos objetos tributarios: garajes, trasteros, sótanos, ruinas, ... Este padrón se tradujo el último año en ingresos para el Concello de casi 13 millones de euros. Una recaudación que por imperativo del Gobierno se incrementará en 1,3 millones este año, es decir, cada recibo experimentará una subida del 10%.

Por tanto el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) reportará al Concello al menos 1,8 millones de euros más que hace un año si finalmente, como prevé el gobierno local, se actualiza el padrón municipal.