Pontevedra es el municipio de España con más alto porcentaje de viviendas unifamiliares aisladas. El 83% del denominado "suelo artificial" está ocupado por este tipo de residencias, lo que pone de manifiesto la dispersión de la edificación en el territorio municipal, un fenómeno que se repite en toda Galicia, toda vez que Ourense es la segunda ciudad española en este curioso ránking (76,6%), Lugo figura a continuación (64,1) y en cuarto lugar aparece Vigo (59,6), dentro de un exhaustivo informe elaborado por el Ministerio de Fomento que, bajo el título "Capitales&Ciudades+100" analiza un total de 79 ciudades españolas, entre las que aparecen las cuatro capitales gallegas y Vigo.
El documento define "suelo artificial" no solo "la ciudad construida, sino también las infraestructuras de transporte, las zonas en proceso de construcción, los vertederos e incluso las zonas verdes urbanas".
Añade que aunque en este apartado solo se analiza la evolución conjunta de las superficies artificiales este periodo (la última década) ha estado marcado por un cambio en los componentes del crecimiento urbano y gran parte del aumento de estas superficies ha estado relacionado con la construcción de nuevas infraestructuras, zonas industriales (principalmente logísticas) y comerciales, vinculadas estas últimas al desarrollo de las grandes superficies comerciales construidas en torno a los ejes viarios de acceso a las grandes ciudades.
Los elevados porcentajes de vivienda aislada en la provincia contrastan con la media española, que es cuatro veces menor, un 21%.
El propio estudio detalla que "la edificación de baja densidad con viviendas unifamiliares aisladas domina en el norte debido al tradicional hábitat disperso, y también en la zona mediterránea sur y sureste". De hecho, tras las cuatro ciudades gallegas aparece Marbella, seguida de Elche.
El número de hectáreas calificadas como "artificiales" en Pontevedra ronda las 1.050, lo que supone el 18% de toda la superficie municipal, un porcentaje que también supera, aunque ligeramente, la media española, que es del 15%. Sin embargo, ante la abrumadora mayoría de la vivienda aislada, el resto de modalidades de ocupación del terreno resulta casi residual.
Los edificios entre medianeras, es decir, el continuo urbano de un bloque adosado a otro habitual en las ciudades, solo significa a orillas del Lérez el 1,1% del suelo artificial ocupado, si bien es donde mayor porcentaje de población reside, lo que significa que más de la mitad del censo municipal vive en poco menos de 11 hectáreas, cuando la inmensa mayoría de los vecinos del rural (menos del 25% de la población) ocupa más de 850 hectáreas. Así se pone de manifiesto en este análisis, que agrega que la vivienda unifamiliar adosada es prácticamente inexistente en el municipio, con 20.000 metros cuadrados ocupados, el 0,2% del "suelo artificial". Los edificios aislados y las naves suponen el 15% de ese territorio que ha dejado de ser "virgen".
En todo caso, los terrenos municipales sin aparente presencia humana, que en el estudio son denominados como "zonas forestales y dehesas", aún son mayoritarios en Pontevedra, ya que ocupan bastante más de la mitad de todo el territorio (el 58,7%), mientras que el suelo considerado urbano en menos del cinco por ciento.
En este sentido, en los últimos veinte años el aumento del "suelo artificial" en el municipio apenas aumentó un 7%, de unas 970 hectáreas en 1987 a las 1.050 actuales, muy por debajo de la media española, que fue seis veces mayor. El estudio indica al respecto que "de forma específica, el conjunto de las 79 ciudades analizadas expandió sus suelos artificiales un 43,7% en este periodo muy por encima del 15% en que creció su población.
Esta mayor dinámica de crecimiento está relacionada con los cambios de modelo de crecimiento en la ciudad, con el desarrollo de suelos residenciales de baja densidad, con el incremento de las redes de infraestructuras y de la introducción del modelo de los grandes complejos comerciales y de ocio en el entorno de las grandes ciudades, en emplazamientos con suelos más baratos que en los centros urbanos; todo este proceso ha estado vinculado al incremento de la movilidad basada en el transporte privado".
El estudio "Capitales&Ciudades+100" enmarca a la capital en el Área Urbana Pontevedra-Vigo, que incluye un total de catorce municipios (aunque no detalla cuales son) y en la que la ciudad del Lérez aporta el 16% del territorio (frente al 15 por ciento de Vigo), el 14% de la población (cuando la ciudad olívica supera la mitad de todo ese censo metropolitano) y el 16,3% del empleo (y Vigo ronda el 58 por ciento).
