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Albariño y río Lérez, un cóctel turístico

La ciudad explotará su potencial enológico

Pontevedra quiere seguir creciendo como destino turístico y por eso ensaya la fórmula de un "cóctel" en el que el Albariño y la naturaleza son sus principales ingredientes. La próxima edición de la muestra Ferpalia profundizará en la apuesta por el vino de las Rías Baixas como atractivo dentro del creciente nicho de mercado que supone el enoturismo. Pero esta vertiente estará acompañada de una iniciativa que permitirá a los visitantes y a los propios vecinos conocer la ciudad y su entorno desde otro punto de vista. Un recorrido por el Lérez que partirá desde el puente de los tirantes permitirá a los navegantes adentrarse río arriba durante 5 kilómetros.

Ambas propuestas se han unido bajo una misma marca, "Praza do viño". El objetivo es, según sus responsables, ofertar un paquete turístico que incluya alojamiento, almuerzo y cena en establecimientos recomendados y la ruta fluvial del Lérez. La idea fue presentada ayer al alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, y los representantes de los sectores vinícolas, turísticos y comerciales de la ciudad, que pudieron comprobar por ellos mismos las posibilidades que ofrece, además de la promoción de los caldos de la zona, el sorprendente paseo en barca.

Un trayecto que ida y vuelta alcanza los 10 kilómetros y que tendría entretenidos a los turistas durante algo más de una hora. El recorrido muestra la Illa das Esculturas y la playa fluvial como primeros puntos del itinerario. El Mosteiro de Lérez es el siguiente punto y a partir de ahí arranca un tramo que puede resultar desconocido para los propios pontevedreses.

Desde ahí comienza una zona de río entra una frondosa vegetación y en la que se encuentra la cascada a la que acudía el Padre Sarmiento para sus reflexiones o la zona en la que a Castelao le gustaba pasar las tardes en barcas con la compañía de su grupo de amigos. Anécdotas que el promotor de la iniciativa, el organizador de eventos Manuel Cabada, propone como algunas de los apuntes que los guías pueden apuntar en el trayecto. Pero además de estas historias habrá más compañeros de viaje. A lo largo de este último trecho es fácilmente advertible la presencia de patos salvajes o garzas reales.

La idea es que quienes realicen esta visita desciendan de los barcos a la altura del balneario del Lérez para conocer un poco más de historia sobre este histórico emplazamiento inaugurado en 1906 por el mecenas pontevedrés Casimiro Gómez. "El agua que embotellaba aquí se llegó a servir hasta en el Titanic", apunta Muradas.

La idea de reunir en un mismo paquete el enoturismo ya está lanzada y se pondrá en marcha durante los días 21, 22 y 23 de octubre. Luego se realizará, al menos, el primer fin de semana de cada mes. "Es una alternativa más para el turismo, pero también para los visitantes más próximos y de la ciudad; es un paseo muy agradable, pocas ciudades pueden ofrecer espacios naturales tan visitables", valoró Lores al término del trayecto.

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