La madrugada del domingo volvió a dejar nuevos actos vandálicos en la ciudad. La Policía Local identificó esa noche a un joven de Marín por causar desperfectos en el portal de un bloque residencial y a un menor de Bueu por diversos destrozos en tres vehículos. Ambos reconocieron los hechos al ser abordados por los agentes.

La primera de estas intervenciones, alrededor de las 00.30 horas, fue la de los daños en automóviles. Un testigo dio llamada al cuerpo de seguridad municipal. Cuando se iba a retirar un turismo mal aparcado, entre sus ocupantes se encontraba el autor de los hechos, de 17 años. Admitió haber arrancado retrovisores de un Opel Kadett, una furgoneta Volkswagen Transporter y otra Citroën Jumpy estacionados en la calle A Estrada. Sus propietarios fueron advertidos para que presentantes la correspondiente denuncia.

Más tarde, en torno a las tres de la madrugada, los policías interceptaron a un grupo de cuatro sujetos. Entre ellos estaba un vecino de Marín, de 23 años, que asumió ser el responsable de romper, en la calle Riestra, la cristalera de la entrada del número 16. También se dio parte a la comunidad, que ya presentó una reclamación contra el gamberro por los desperfectos ocasionados.