Pena de prisión para un joven por una paliza a otro, a quien culpó de decir algo a su novia

Le dio un golpe en la cabeza, lo tiró al suelo y continuó con patadas y puñetazos por todo el cuerpo | Ocurrió una noche de ocio, en agosto de 2021

La agresión tuvo lugar en agosto de 2021 en la Plaza del Trigo. |   // IÑAKI OSORIO

La agresión tuvo lugar en agosto de 2021 en la Plaza del Trigo. | // IÑAKI OSORIO / J. Fraiz

Javier Fraiz

Javier Fraiz

La jueza del Penal Número 1 condena a un joven ourensano de 24 años de edad por un delito de lesiones, cometido en el contexto del ocio nocturno de la ciudad, en la zona de los vinos, en el mes de agosto de 2021. El acusado se beneficia de unas dilaciones indebidas del procedimiento, con una atenuante de la responsabilidad penal que deja el castigo en tres meses de prisión. La Fiscalía solicitaba un año. El joven, que carece de antecedentes penales, deberá indemnizar al perjudicado con 1.250 euros, aunque su situación es de insolvencia. La resolución no es firme y admite recurso de apelación ante la Audiencia Provincial de Ourense.

Los hechos tuvieron lugar en la Plaza del Trigo, sobre las 3 de la madrugada del 28 de agosto de 2021. El encausado mantuvo una discusión con la víctima, lo golpeó en la cabeza, lo tiró al suelo y siguió con la agresión, propinándole diversas patadas y puñetazos en distintas partes del cuerpo. El perjudicado sufrió policontusiones, tardó doce días en recuperarse de las lesiones y le han quedado, como secuelas de la paliza, cicatrices en el pómulo y el cuero cabelludo.

En el juicio, el encausado dijo que el otro joven había dicho algo a su novia, a lo que él respondió que ya hablarían, según su versión. Acusó al otro de empezar a lanzarle patadas, motivo por el cual él le dio un puñetazo y lo empujó, momento en el que el perjudicado se cayó al suelo. Según el acusado, a continuación lo redujo. Apareció su novia y le dijo que lo dejase, de manera que se levantó y ambos se fueron, relató en el juicio.

El encausado justifica que actuó en defensa de una agresión previa, por haber sido él supuestamente el primero en ser golpeado, con patadas. “No existe ningún parte de lesiones o informe médico que acredite que efectivamente el encausado fue golpeado por el denunciante”, subraya la jueza en la sentencia. “Además, se trataría de una supuesta agresión aceptada por el encausado, el cual pudo perfectamente abandonar el lugar de los hechos, en vez de enzarzarse en la agresión con el denunciante cuando este le lanzaba supuestamente patadas”, añade la jueza en la resolución.

Susana Conde, jueza del Penal 1 de Ourense.

Susana Conde, jueza del Penal 1 de Ourense. / I. OSORIO

El acusado argumentó que no acudió al médico porque no tenía lesiones, ni denunció al perjudicado porque llegó primero la Policía a practicar su detención. “Sin cuestionar que la Policía acudió de forma casi inmediata al lugar de los hechos, no puede olvidarse que el encausado pudo presentar la denuncia de la supuesta agresión una vez quedó en libertad, o incluso cuando prestó declaración como detenido pudo realizar las manifestaciones que estimase oportunas en relación con tales hechos, sin que conste nada en tal sentido”, advierte la autoridad judicial.

La novia del acusado declaró que, cuando se iba con el acusado para casa, a la salida de una discoteca, un joven dijo algo, pero ella pensó que no se refería a ella. Según la pareja del encausado, ese otro joven se dirigió hacia ellos y empezó a dar patadas, alcanzando con alguna a su novio, quien decidió retroceder e intentar pararlas. Según la joven, los dos varones se introdujeron en un callejón y ella no pudo observar qué pasaba. Cuando llegó al lugar, ambos estaban en el suelo, con su novio encima del denunciante.

"A pesar de que el denunciante sostuvo que iba muy mal esa noche por todas las pastillas que había consumido, no existe duda alguna de que el autor de las lesiones producidas fue el encausado"

En el juicio, el perjudicado indicó que esa noche iba “muy empastillado” por sus problemas psiquiátricos. Aseguró que le dieron muchos golpes y no pudo concretar si fue el acusado. “Lo cierto es que este se encontraba en el lugar de los hechos, tal y como reconocieron el propio encausado y el denunciante, quien sostuvo que efectivamente” el joven que ahora es condenado por la agresión “estaba allí, a su lado cuando lo golpearon”.

La víctima sí pudo precisar que, después del golpe recibido, el sospechoso se abalanzó sobre él, provocando su caída al suelo. “Por todo ello, y a pesar de que el denunciante sostuvo que iba muy mal esa noche por todas las pastillas que había consumido, no existe duda alguna de que el autor de las lesiones producidas fue el encausado”, afirma la jueza del Penal 1 de Ourense.

“No existe indicio alguno” de que el perjudicado hubiera sufrido un brote psicótico

La autoridad precisa en la sentencia que “no existe indicio alguno” de que el perjudicado hubiera sufrido un brote psicótico esa madrugada. “De ser así, constaría reflejado en el parte de Urgencias (...), más si tenemos en cuenta que acudió poco tiempo después de haber sufrido la agresión”, indica la jueza. En ese documento sanitario tampoco se hace referencia alguna a una posible agresividad del denunciante por el consumo de estupefacientes, como sugirió la defensa.

Un indicio adicional para condenar es que las lesiones que constan en el informe médico “son plenamente compatibles con la dinámica lesional descrita por el propio perjudicado y también por el encausado”. En el juicio, el forense declaró que las heridas observadas eran “plenamente compatibles con un golpe en la cabeza contra un adoquín al caer”, detalla la sentencia de primera instancia.

La aplicación de la atenuante de dilaciones indebidas, muy cualificadas, se debe a que desde que la causa se remitió al juzgado de lo Penal en mayo de 2022, hubo dos señalamientos fallidos –noviembre de ese año y junio de 2023–, hasta que finalmente la vista pudo celebrarse, el pasado día 20, “sin que ninguna de las suspensiones anteriores pueda ser atribuida al encausado”, admite la jueza.

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