A primera hora de la tarde de este viernes era localizada en Pena Trevinca la avioneta del servicio antiincendios desaparecida el pasado miércoles después de partir de la base lucense de Doade. La aeronave fue avistada alrededor de las 15:30 por un helicóptero de Medio Ambiente de Castilla y León, según ha confirmado la Subdelegación del Gobierno en Ourense.

El lugar, en el municipio fronterizo con Galicia de Porto, es bastante inaccesible, por lo que el peor de los presagios no se confirmaba hasta avanzada la tarde. Finalmente, se ha localizado el cuerpo sin vida del piloto andaluz al que se le perdía la pista casi una hora después de despegar de Galicia hace dos días. Se trata de Santiago Durán Alzugaray, de 36 años, vecino de Gines (Sevilla) y padre de dos hijos.

Desde la aparición del fuselaje del aparato, para muchos no hubo lugar a la esperanza, y ya dieron por hecho lo que, por desgracia, se confirmaba oficialmente más tarde: que el piloto andaluz que desempeñaba labores de extinción en Galicia no ha sobrevivido al accidente. Desde ese momento en que saltó la noticia del paradero de la avioneta accidentada, las condolencias y los mensajes de tristeza se han multiplicado en redes sociales, por parte de compañeros de trabajo de Santiago y usuarios anónimos que se quisieron sumar a ese pesar.

Hace dos años y medio, Santiago, que comenzó a formarse como piloto comercial en 2009, entró a trabajar para Plysa, la empresa para la que prestaba sus servicios en la actualidad. Esta compañía se dedica principalmente a prevención y lucha contra incendios en el sur de Europa, norte de África y Sudamérica. Este año, sus labores se centraron en el servicio de extinción de incendios de la Xunta , de ahí que estuviese en la base de Doade de donde partió el pasado miércoles rumbo a Córdoba, viaje que, desgraciadamente, no llegó a su destino.