Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

CRISIS SANITARIA GLOBAL

Andrea, de 21 años, ingresada y curada de COVID: “Lo que más quería era ver a mis abuelos”

La ourensana, que pasó seis días ingresada en la planta del CHUO, ya está en casa: “Nunca me imagine que iba a estar allí”

Andrea Blanco,a la derecha, con dos enfermeras en el hospital ourensano. | // FDV

Andrea acaba de salir del Complejo Hospitalario de Ourense y lo primero que hizo es ir a ver a sus abuelos. Mientras en la primera ola eran los nietos los que temían por los abuelos, ahora son estos los que se preocupan por el aumento de la incidencia en este grupo de edad. Los abuelos de Andrea ya respiran aliviados después de seis días ingresada en la planta del hospital ourensano, por una neumonía bilateral. “Sí claro que te asustas, al principio, porque no sabes cómo puede evolucionar y mi familia también se preocupó, al igual que mis abuelos y mis amigos. Gracias a Dios estuve bien, dentro de lo que cabe, porque no me tuvieron que poner oxígeno. Pero bueno al poder hablar con ellos por videollamadas y ver que me encontraba bien, ya estaban menos preocupados”.

“Mi familia y mis amigos, al principio, no se podían creer que estuviera ingresada”

decoration

Andrea Blanco empezó con síntomas leves y después notó una sensación de falta de aire. “Empecé con algo de tos, algo de fiebre, un poco de dolor en la garganta pero tras pasar cuatro días noté como me faltaba el aire y eso hizo que fuera el médico y ya me dijeron que tenía neumonía y ya me ingresaron”. En su alrededor ni amigos ni familia estaban contagiados y no sabe dónde pudo contraer el COVID. Cuando ingresó en el hospital ourensano, sus amigos “alucinaban, nadie se lo creía. Nadie en mi entorno, pensaba que me pudiera pasar, pero cuando te toca de cerca te impacta más. En la vida me imaginé que iba a estar ingresada por COVID, pensé que al ser joven iba a estar 10 días de cuarentena en casa, que iba a dar negativo y ya está. Pero bueno, podía haber sido peor, podría haber ido a la UCI con oxígeno, así que dentro de lo que me tocó vivir estoy bien. Cuando pasa de verdad, no te lo imaginas”.

Andrea Blanco, en su habitación en el hospital ourensano. //FdV

Ella estuvo encerrada en una habitación, atendida por unas profesionales sanitarias a las que agradece el trato recibido después de conocer ayer el alta. “La verdad es que siempre son muy precavidas, tienen mucho cuidado con todo y se les ve tranquilas después de pasar todo lo que pasó, durante este último año. A pesar de que parecen cansadas, siempre tienen un trato excepcional y buenas palabras. Todo fue genial, siempre te saludan con una sonrisa”.

“Porque seamos jóvenes no debemos dar nada por hecho o pensar que no nos va a tocar a nosotros”

decoration

A sus amigos, les cuenta su historia y les dice que “tengan responsabilidad, que ya la tienen vaya, les digo que salgan, que se relacionen, pero siempre con precaución, que tengan cuidado, porque yo soy el mejor ejemplo, estar allí ingresada, no le hace gracia a nadie”.

Sobre las imágenes de concentración de botellones y peleas en el casco histórico dice que “no vi mucho, pero algo sí y te asustas un poco, te da impresión. Pero es que dentro del hospital vives una situación diferente y te das cuenta cuando estás ingresado o dentro con las enfermeras como cuidan cada mínimo detalle y después ves que en un bar, no estás bebiendo y no te pones la mascarilla. Ponerla puede impedir que te contagies, así que hay que hacerlo”. 

Aconseja relacionarse, salir y disfrutar con la precaución necesaria para no contagiarse y con la responsabilidad individual que incentive el compromiso colectivo. Ahora ella ya se recupera en casa después de un abrazo a sus abuelos que tanto anhelaba. “Mientras estaba dentro pensaba en mis amigos, pero sobre todo en mi familia, quería estar con mi familia, porque los echas mucho de menos porque no te pueden visitar y realmente piensas lo importante que son”. 

“A mis amigos les digo que cuando salgan, tengan cuidado, estar ingresado no le hace gracia a nadie”

decoration

Andrea hizo los exámenes del tercer curso de Educación Infantil y se contagió. Superó el COVID y ahora visibiliza que “los jóvenes no podemos dar nada por hecho porque seamos jóvenes ni pensar que no nos va a tocar a nosotros. Yo estaba bien, sin patologías previas, hacía vida normal y estuve ingresada seis días en un hospital. Hay que tener cuidado y no se puede pensar que no te va a pasar a ti, porque le puede pasar a cualquiera”.  La mejor advertencia de una de las pacientes ingresadas más jóvenes de toda la pandemia en el hospital ourensano.

Andrea Blanco, en su habitación en el hospital ourensano. //FdV

Compartir el artículo

stats