Tras Nieves Cabo, de 82 años, la primera ayer en la residencia Porta do Camiño de Santiago de Compostela, el listado de mayores gallegos que recibirán la vacuna de Pfizer-BioNTech contra el coronavirus continuará creciendo a partir de mañana. La comunidad recibirá hoy otras 18.000 dosis, la remesa de esta primera semana, para inmunizar a residentes en geriátricos y trabajadores de este sector que tanto ha sufrido la pandemia de COVID en la primera y la segunda olas. Al área sanitaria de Ourense, Verín y Valdeorras le corresponderán unas 3.000 para esta semana. La ruta de la vacuna contra el coronavirus comenzará en la provincia mañana martes, desde primera hora, desde el amanecer. Llega así la esperanza de que esta solución de la ciencia ponga freno a una enfermedad que, desde marzo, ha matado a por lo menos 308 personas –según los datos del Sergas–, tras contagiar en Ourense a un total de 8.387 a las que se les detectó el virus.
Se han conformado un total de once equipos de alta cualificación, compuestos por personal voluntario de Enfermería de Atención Primaria. Son un total de 22 profesionales de distintos centros sanitarios, tanto de la ciudad como del rural, que se desplazarán a todas las residencias de mayores y discapacidad. Hay otros 11 suplentes por si se produce cualquier eventualidad. La primera fase, que arranca este martes, durará tres semanas. Ourense registra la mayor concentración de toda Galicia de personas en centros sociosanitarios, así como también de cuidadores. Para el Sergas, “constituye un reto adicional al que la propia situación implica”.
“Una indudable complejidad”
Los equipos especiales de vacunación están coordinados por la subdirectora de Enfermería, Josefa Rodríguez, y por Verónica Civeira, supervisora de Enfermería del área de crónicos. Esta sanitaria, natural de O Carballiño y de 40 años, contrajo y superó la enfermedad en la primera ola, con síntomas leves pero diversos. Civeira también se encargó de organizar la parte de enfermería en el Equipo de Seguimiento Compartido de Atención Hospitalaria (Escah), que ha realizado el seguimiento individualizado de pacientes que se encuentran aislados en su casa, bajo seguimiento telemático. “Participar en este proceso de vacunación supone ilusión, ganas, motivación, esperanza... Todo eso y más”, valoraba ayer esta enfermera.
Los profesionales que vacunarán por toda la provincia recibieron durante la pasada semana formación telemática sobre la campaña y las formas de actuación. También mantuvieron reuniones para la dotación del material preciso y para saber cómo emplear los recursos informáticos y de comunicación necesarios para la administración de las dosis y el registro de datos de las personas inmunizadas.
Una ourensana en Cataluña
El área sanitaria reconoce que “este proceso tiene una indudable complejidad logística y operativa”. “Ourense contra a COVID. Ímolo parar xuntos”, rezan las chaquetas rotuladas que portarán las enfermeras y enfermeros de los equipos contra el coronavirus. En sus desplazamientos llevarán maletines de primeros auxilios con útiles y medicación básicos, además de los elementos de protección necesarios, como batas desechables, mascarillas, guantes o pantallas faciales. Pero, sobre todo, llevarán esperanza, después de tantos meses de sufrimiento y pérdidas.
Josefa Pérez, natural de Ourense y de 89 años, es una residente del geriátrico Feixa Llarga de L’Hospitalet de Llobregat. Ayer se convirtió en la primera persona vacunada en Cataluña. Emocionada, entre lágrimas, devolvió con un aplauso la ovación que surgió en la sala. “Llevo tiempo diciendo que me quería vacunar. No me tocó la lotería, porque no juego. Pero hoy sí me ha tocado”, declaró esta ourensana ayer a la televisión autonómica TV3.
Más de 2.000 acuden al primer día de cribado en Verín, el 70% de los convocados
En el área sanitaria de Ourense, la incidencia acumulada a 14 días es de 158,62, por debajo de la cifra del conjunto de Galicia, 182,18. En la ciudad el dato es 134,94. La provincia registró 16 nuevos casos diagnosticados en 24 horas, un periodo en el que se hicieron 251 pruebas PCR. El número de pacientes con una infección activa de COVID es de 540, con 517 personas aisladas en su casa, bajo seguimiento telemático. Un 4,26% requiere hospitalización: hay 23 ingresados, 4 en críticos. Con el fin de detectar a los asintomáticos y frenar la expansión del virus, en Verín comenzó ayer un cribado masivo, al que han sido citados 10.000 vecinos hasta el miércoles, más del 82% de la localidad, que tiene 50 casos activos. En la primera jornada fueron convocados 2.880 de entre 15 y 69 años. Se presentaron 2.007, el 69,7%. Recibieron un tubo para depositar y entregar hoy su muestra de saliva en ayunas. A los mayores de 69 –casi 2.000– se les hará PCR los siguientes días.
