Antes del repunte de temperaturas de las últimas horas, Ourense había experimentado sus primeras jornadas de frío intenso de este invierno. Valores de 0º e incluso negativos dejaron también sus efectos en la red de carreteras. Para prevenir frente al riesgo para la seguridad vial que suponen la nieve y la formación de placas de hielo, un total de siete concellos de la provincia de Ourense dispondrán de nueva maquinaria con la que conservar en buen estado las vías de su término municipal y área de influencia. Son Allariz, Celanova, Cualedro, Melón, Ribadavia, Rairiz de Veiga y Xinzo.
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La Xunta comenzó con la entrega de equipos esparcidores de sal esta semana, en un acto al que asistieron el conselleiro de Presidencia, Administracións Públicas e Xustiza, Alfonso Rueda, así como el director xeral de Emerxencias, el ourensano Luis Menor. La mitad de los 15 concellos de las cuatro provincias que contará con equipos de conservación invernal pertenecen a este territorio.
Los esparcidores de sal que se ponen a disposición de los concellos pueden ajustarse a vehículos todoterreno o remolques. Se accionan con un motor eléctrico y tienen una capacidad aproximada de 300 litros. Según destaca la Xunta, los concellos cumplen un "papel esencial" en la protección civil, al corresponderles el primer nivel de respuesta frente a cualquier emergencia. De ahí la necesidad de que dispongan de medios.
Para efectuar esta compra, la Axencia Galega de Emerxencias (Axega) destinó cerca de 50.000 euros en el marco del programa operativo de fondos europeos FEDER. El programa completo para material de emergencias está dotado con 1,7 millones. Con cargo a él se adquirieron 10 vehículos "pick up", siete furgonetas, un camión contra incendios, diez remolques de emergencias, tres embarcaciones, cinco equipos de respiración autónoma y más de 400 terminales TETRA de comunicaciones de emergencias para los concellos (móviles, portátiles y fijos).