La Comunidad de Murcia ha solicitado formalmente que Cartagena se convierta en nueva provincia de esta Autonomía, amparada, fundamentalmente, en cuestiones históricas y geopolíticas. Vigo ya ha sido en el pasado hasta tres veces capital de la provincia de Vigo. Se trata, pues, de una reivindicación histórica que Vigo merece por razones más que obvias y que además tiene unas claras implicaciones económicas y políticas.

Este melón que acaba de abrir Murcia es más que interesante para que Vigo se convierta por fin y definitivamente en capital de la provincia que lleve su nombre. Y no hay que renunciar al Área Metropolitana, no son excluyentes.

La explosión magnífica de Vigo como ciudad se daría con esta actuación. Ganaría el peso político del que careció siempre para conseguir sus legítimos derechos y oportunidades. No nos podemos imaginar la dimensión que alcanzaría Vigo con esta nueva consideración administrativa.

No será fácil y sí largo; pero la provincia de Vigo será un legado indispensable e insustituible para las generaciones futuras de vigueses. Peguémonos a la demanda legítima de Cartagena y sigamos sus pasos y su estela porque la provincia de Vigo podría ser la mejor noticia de su historia. Abel Caballero, precisamente presidente de la FEMP de España, tiene en su mano liderar esta operación para mejorar el devenir de toda Galicia con esta más que legítima demanda.